• Parte 4

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A la noche cuando todos ya se habían ido del departamento, Autumn sacó el cuadro del envoltorio y le pidió a Colin que pusiera un gancho en la pared del diván para colgarlo.

—Qué lindo, ¿te lo dio Avalon?

—Sí, es parecido al que tiene en el estudio de maquillaje de su dormitorio. Se lo pidió al mismo pintor que le realizó los demás que ella tiene en su casa y empresa.

—Queda muy bien con los colores del mobiliario.

—Sí, me trajo más cosas.

—¿Sí?

—Ajá, maquillajes, adornos para el departamento, alguna que otra joya y ropa.

—¿Crees que lo está haciendo para redimirse o que le aceptes su perdón?

—No, ya la perdoné, ni sé si tenía que perdonarla porque...

—Porque... ¿qué te pasa por la cabeza?

—No sé —le sonrió—, fue todo tan rápido que no asimilé nada. Solo sé que la necesidad de tener una madre me hizo perdonarla enseguida, no sé qué hubiera hecho yo en su lugar, quizás lo mismo.

—Tú tuviste dudas cuando confirmamos que estabas embarazada, no sabías qué hacer.

—Nunca se me cruzó por la cabeza abortar, me superó la noticia por lo que estábamos viviendo con Heather y Summer.

—Las cosas se resolvieron y ya no tenemos de qué preocuparnos.

—Está todo tan tranquilo que me cuesta creer que no van a seguir molestando y que mi padre las tiene vigiladas.

—¿No crees que tus padres tienen algo inconcluso? —Cambió de tema.

—¿Algo inconcluso? ¿Te refieres a su relación?

—Sí, hay algo entre ellos dos que no se terminó, pasaron veinticinco años, pero es como si los dos siguen sintiendo algo el uno por el otro.

—Puede que tengas razón —comentó y se rio de repente—. Acabo de pensar algo que sería un poco descabellado, si es como dices realmente, estaría creyendo que a mi padre se le ocurrirá pedirle a Avalon que se case con él.

—Dos bodas en un año —se rio él también.

—Capaz que se casan como nosotros, sin decirles a nadie —continuó riéndose y le dio un beso en la mejilla cuando se puso en puntas de pie.

—¿Y si se casan? ¿Qué opinarías?

—Que en parte todo volvió a la normalidad, no me desagrada que lo hagan, tienen que hacer lo que les haga feliz.

—Así como yo contigo, hago las cosas para hacerte feliz y a su vez tú me haces feliz a mí —la abrazó por la cintura para besarle los labios.

—Qué poético estás esta noche —le contestó sosteniéndolo de las mejillas y dándole otro beso en la boca.

—¿Y no te gusta que sea así?

—Sí, mucho —emitió volviendo a besarse.

Cada beso aumentaba más la tensión sexual que tenían y Colin supo lo que debía de hacer cuando vio la expresión de deseo en el rostro de su esposa.

La cargó en su hombro para llevarla a la cama mientras escuchaba los quejidos y las risas de parte de ella.

Un buen tiempo después, su marido salió de la cama luego de darle un pico y buscó dentro de uno de los cajones de la cómoda del cuarto un libro de fotografías, cuando lo tuvo en sus manos regresó al lado de Autumn y le entregó lo que parecía un álbum.

—¿Qué es? —le preguntó intrigada.

—Ábrelo y te sacarás la duda.

—De acuerdo —le dijo al tiempo que lo abría y se quedó bastante sorprendida al verlo en fotos profesionales—, es un porfolio de fotos de agencias de modelo —lo afirmó—. No lo hubiera pensado que te gustaba modelar.

—Cuando era mucho más joven, hice algunas pasarelas y campañas publicitarias para diferentes marcas.

—¿Y no te gustaría volver a eso?

—Lo hice cuando tenía veinte, ya no tengo ese entusiasmo que tenía a esa edad, ahora tengo otras prioridades y me gusta trabajar en la empresa.

—Entiendo, estas fotos en blanco y negro me encantan, te ves hermoso.

—Gracias —le sonrió.

—Nunca te vi en una pasarela o revista.

—Cuando yo hacía ese trabajo, tú todavía eras una adolescente.

—Es verdad y en mi casa en esa época no estaban bien las cosas.

—Pero ahora estás aquí conmigo —le puso la mano entre sus piernas cuando terminó por acariciar el muslo que tenía cerca—. Y ya no quiero ver más fotos mías para que veas lo sexy que salgo porque me puedes ver frente a ti ahora mismo.

—¿Tu segundo nombre es modesto? —cuestionó entre risas sintiendo cómo la acostaba otra vez sobre el colchón.

—Es posible —se rio contra sus labios y la besó para luego amarla de nuevo.

Durmieron abrazados una hora más tarde.

Otoño 1 y 2 - {Bilogía: Romance Otoñal}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora