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-No puede ser- frunce el ceño Regulus.

-¿Potter te engaña?- molesta Crouch viendo a su mejor amigo sentarse otra vez en el sillón.

Regulus lo mira con pánico.

-No le digas eso, James nunca lo engañaría.

-¿Qué pasó, Regulus?-  pregunta Evan acariciando su hombro amistosamente.

Black le extiende la prueba de embarazo.

-¿No puede ser porque...?

-Nos cuidamos.

-¿Seguro? ¿Reggie cuantas veces lo hacen al día?

-Una o dos, depende si Harry duerme en su cama o no.

-Wow- responde Dora impresionada- con razón.

-¡Pero todavía no me caso! la boda es en tres meses,  no puedo estar gordo. No me entrará el traje.

-Yo creo que le gustarás más panzón.

-Ay Barty, que fea forma de decirlo. ¿Cómo nos sentimos, Reggie? Puedes no tenerlo.

-Si lo quiero, no quiero que arruine mi outfit.

-Amo como recuperaste tu personalidad cuando empezaste a salir con Potter. 

-Sabes lo que mereces y obtienes todo lo que quieres- señala Barty.

-Regulus pequeño estaría encantado de volver a encontrarse- Menciona Pandora mientras come de su helado.

Reggie sonrie mientras las lágrimas de emoción caen por sus mejillas.

-Es tan lindo volver a ser yo, sin pasar miserias, tener comida calentita, comprar cosas que me gusten... y ahora es mejor, porque tengo un prometido increíble que genuinamente me ama y un hijo que me eligió él mismo, hogar, calor y amor. Algo que me faltó siempre.

-Dos ¿no?- sonrie Barty divertido.

-Dos niños, ¡dos niños!

-¿Qué con dos niños?- pregunta James bajando las escaleras.

Los amigos se miran.

Regulus guarda la prueba de embarazo en el suéter de Evan.

-Dos niños es...

-El nombre para una marca de ropa- completa Barty.

Evan lo mira confundido, 

-Que tonto es- susurra a Reggie.

-Oh, buen nombre- responde James caminando a la cocina.

Regulus rueda los ojos.

-Creo que gano yo en competencia de esposos estúpidos- responde entre susurros Black.

-Creo que están empatados- susurra Dora elevando un pulgar- ¿Helado?

Regulus sonrie divertido.

-¡HELADO!- grita Harry corriendo escaleras abajo.

-¡Harry te caerás!- anticipa Regulus.

James llega a atraparlo, Regulus no sabe cuando corrió tan rápido que ni siquiera lo vio llegar.

-¿Acaso no lo viste venir?- pregunta divertido mirando a su esposo y luego a Harry.

-¡Quiero helado!- pide Harry deshaciéndose del agarre de James.

Dora le extiende el pote.

Luna que, hasta el momento estaba durmiendo la siesta sobre las piernas de su tío favorito (Barty) eleva la cabeza.

-¿Helado?

Maestro Reggie//JegulusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora