HAUNTING BUTTERFLY (Lobo y conejo)

| Capítulo 32 |

Pesadilla.
Tessa.

Vine aquí sin previo aviso. Descubrí mi propósito. Volveré victoriosa.

Liberaré a todas las sumisas de este burdel, detendré el trato de blancas, terminaré la operación que estaba planeada pero desde el interior, soportare lo que deba soportar porque no permitiré otra violación a las leyes nunca mas, estas mujeres podrán vivir en paz y ni una muerte mas.

Es una promesa. Yo no rompo mis promesas.

-ooo-

Esquivo y contraatacó.

Desarmó a Kristen cuando atina a dispararme, la empujó e intenta atacarme nuevamente con ferocidad, sin una pizca de sutileza porque sabe que puedo defenderme. Ella ve en mi un potencial mayor al que yo puedo ver en mi. Me quito toda barrera, al segundo me inclino y doy un giro en el suelo con mi pierna extendida haciendo que Kristen cayera al perder el equilibrio pero sin inmutarse se abalanza sobre mi acercando su puño a mi rostro el guía esquivo y doy un rodillazo en su abdomen.

La adrenalina me absorbe y no me paralizo en ningún momento, la imagen brutal de las sumisas entrando en este gimnasio cada una con una habilidad. Una es mejor es acrobacia, otra en contraataques, otras con el cuchillo.

La imagen del bar vuelve a mi mente como un recuerdo pertubador que no quisiera acordarme más, Zayn sangrando en mis brazos, el miedo e impotencia de perder a mi equipo en cualquier segundo, me consumiría la culpa si no hubiera venido aquí. Era la única forma de que Rx no los matara y mi misión cambió. Zayn seré como tú, ahora yo protegeré a estas mujeres y te protegeré a ti mi amor, pronto podremos vernos de nuevo, espera un poco más por mi, seré más fuerte y ya no habrá nada que pueda separarnos. Es una promesa.

La acción inmediata y brusca me devuelve en si nuevamente. Kristen se avecina a mi y logro paralizar sus ataques constantes sin cansancio entre los miles de flashback que vuelven a controlar mi mente, con cada ataque que da Kristen cada flashback vuelve a mi como un trauma, un golpe; cada disparo que recibí, otro ataque; la persecución del hospital, una patada; Rx perturbándome hasta en mis sueños.

Reuní todas mis fuerzas en contra de mis demonios con el sonido de las balas retumbando en mis tímpanos, una fuerza brutal cargada de violencia proveniente desde el sentimiento de la irá la cual de denota en Kristen quien tenía sus manos alrededor de mi cuello, los destellos que calan en mis pupilas, destellos y más gritos de horror como en el club en aquella masacre. Rechinó mis dientes y mis venas arden de la furia que desprende de mi y con una última mirada sombría me abalanzó atacando con todas mis fuerzas a Kristen, dejándola inmóvil en el suelo.

Con la respiración agitada apuntó de caer de rodillas al suelo, pero no lo haría. Me forcé a mi misma a mantenerme de pie y no caer junto al rival.

Kristen tumbada en el suelo inmóvil, sangre fresca en su labio y nariz, con los ojos entrecerrados apenas con movilidad. Mis ojos cargados de preocupación al ver como la dejé postrada sin fuerza me empezaba a llenar de ansiedad.

Mis ojos se abrieron más de la sorpresa de verla en ese estado. Una carcajada resonó a mi alrededor y una sonrisa apareció en sus labios.

—Parece que encontraste tu fuente de impulso, Hela—murmuro Kristen tras soltar un suspiro.

—Mientras seas tú quien lo pronuncie, no tengo objeciones.

—Se que Roman Xidirov es el hombre al que más odias, créeme que compartimos el mismo sentimiento—estrecha mi mano para levantarse.

—Pareces tener algo personal con el.

—Algo así, llevo años en este negocio del cual me encantaría salir, pero me sentiría culpable de hacerlo.