Luz 𝓎 Sombra ᩡ ݂ jaedo ׄ ׅ

𝟷𝟻

Lo primero que hizo Jaehyun fue comenzar a desabotonar la camisa del omega, sus dedos moviéndose con una precisión ágil y certera. La mirada de Doyoung estaba fija en sus manos, su pecho elevándose y descendiendo con una respiración cada vez más agitada. Mordiéndose el labio, Doyoung no podía apartar la vista mientras Jaehyun se deshacía de su ropa, cada botón desabrochado aumentando la anticipación.

A medida que la camisa se abría, revelando la ligera camiseta sin mangas que Doyoung llevaba debajo, el omega se sentía cada vez más nervioso y excitado. Su miembro endurecido latía bajo la ropa, respondía al simple acto de Jaehyun desabotonando su camisa. El contraste entre la simplicidad del gesto y la intensidad de la situación lo abrumaba, cada pensamiento fugaz sólo lograba excitarlo más y más. Jaehyun, con una concentración sensual, lograba convertir algo tan cotidiano en un acto cargado de deseo y expectación.

Doyoung levantó los brazos para ayudar a Jaehyun a deshacerse también de la camiseta y poder comenzar de una vez.- Amo tu cuerpo, es tan hermoso, todo tú lo eres. - Le susurró antes de comenzar a besar sus orejas, haciendolo estremecer, se estremeció por completo cuando sintió los labios del alfa sobre su cuello, pero no se mantuvo mucho tiempo allí sino que comenzó a bajar lentamente con los labios, trazando un camino de besos por todo el torso desnudo, pasando por sus clavículas, su pecho, su estómago. Allí por donde pasara la boca ajena, Doyoung sentía la piel ardiendo, por eso pudo respirar bien apenas Jaehyun se detuvo en su abultado pantalón, y pronto este caía a sus piernas junto con el bóxer, quedando el omega completamente desnudo.
Atrás había quedado la vergüenza, de todos modos; ya no se sentía tímido frente a Jaehyun, no cuando él lo miraba con tanto deseo como en ese momento. Por eso, por primera vez, Doyoung tomó la iniciativa y llevó los labios al cuello del contrario, comenzando rápidamente a besarle la piel mientras cambiaban de lugar lentamente. No tardó en descubrir que era una zona sensible para Jaehyun pues apenas su lengua le rozó la nuez, un gemido ronco escapó de los labios del chico, recorrió cada centímetro del cuello y la mandíbula del alfa con la lengua, succionando de a ratos y dejando marcas visibles en el camino nada más para deleitarse con los gemidos que le provocaba.

Impulsado por los gemidos de Jaehyun empezó a bajar por el cuello ajeno, llegando a las clavículas y siguió bajando. Dejó bien marcado el rastro que recorrió su lengua, pues el cuerpo pálido frente a él ahora estaba lleno de chupetones que tardarían bastante en irse, pero poco le importó. La piel de Jaehyun se marcaba tan bien que era delicioso a la vista.

Estaba lamiendo a
Jaehyun como si se tratase de una paleta, el chico sabía tan bien como una, por eso seguiría.
Mientras se entretenía con los pezones llevó las manos por todo su abdomen hasta dar con el pantalón ajeno, que poco hacía por ocultar la erección de Jaehyun, de modo que de muy buena gana metió las manos bajo este y se encontró con el miembro del alfa atrapado bajo el estorboso bóxer, haciendo que Jaehyun gimiera por el roce. Como pudo se deshizo de las dos prendas quedando así ambos desnudos.

El plan de Doyoung era continuar con el camino de besos por el pecho de Jaehyun y llegar finalmente a la erección del chico, así que eso hizo, su lengua reanudó el recorrido sobre aquel torso pálido, ayudada de a ratos por sus dientes, hasta que finalmente llegó al pene del pelinegro. Tomó el pene del alfa con una mano nada más para sostenerlo derecho mientras pasaba la lengua por toda la extensión de este, humedeciéndolo lo suficiente para que la tarea de engullirlo entero después no fuera difícil. Jaehyun gemía cada vez más ronco debajo de él, y eso lograba volverlo loco.

Levantó la vista por unos segundos y se encontró con la mirada negra de Jaehyun, un escalofrío recorrió toda su espalda al notar fuego en los ojos del alfa. Le dedicó una sonrisa que el pelinegro correspondió y enseguida sintió cómo Jaehyun enredaba la mano en su cabello y lo jalaba con fuerza. Entonces dejó de prolongar los jueguitos y simplemente envolvió el pene de Jaehyun con la boca. Comenzó por tomar el glande, sosteniéndolo como si realmente fuera una paleta, lamiendo la punta mientras presionaba suavemente con los labios, y poco a poco fue acercando la nariz hasta la pelvis con lentitud, engullendo el miembro hasta la base.
Entonces comenzó a metérselo y sacárselo de la boca, desesperando a Jaehyun, pero disfrutando en exceso cómo sonaban los quejidos del alfa.