Luz 𝓎 Sombra ᩡ ݂ jaedo ׄ ׅ

𝟸𝟽

Jaehyun despertaba cada mañana con un nudo en el estómago, un nudo hecho de ira y dolor. La rutina de la última semana se había convertido en una tortura. Al abrir los ojos, lo primero que veía era a Doyoung durmiendo plácidamente junto a Soohyuk, un gesto que Jaehyun veía como una traición personal.

Después de arreglarse con manos temblorosas, Jaehyun salía al jardín y encendía un cigarrillo, el humo elevándose como un velo entre él y la realidad distorsionada que ahora vivía. Sus ojos seguían con frialdad el trayecto del auto de Soohyuk mientras este se llevaba a Doyoung al trabajo. Jaehyun solía seguir el auto en su propio vehículo, asegurándose de llegar al estudio al mismo tiempo que Doyoung, aunque ya no se molestaba en saludarlo o intercambiar palabras que no fueran puramente funcionales.

En el estudio, Jungwoo se había convertido en su fotógrafo principal, aunque Jaehyun se esforzaba por no dirigirle la palabra ni siquiera para dar indicaciones durante las sesiones. Aunque Jungwoo extrañaba su amistad, Jaehyun lo mantenía a distancia emocionalmente, exigiendo revisar personalmente cada foto tomada, una tarea que normalmente correspondería a los editores.

Al final del día de sesión, cuando todos se marchaban, Jaehyun permanecía en el estudio hasta el último momento. Subía al balcón donde alguna vez había estado con Doyoung, observando con ojos vidriosos cómo Soohyuk llegaba para llevarse a Doyoung a casa. Solo entonces, Jaehyun regresaba a su hogar, encerrándose en su habitación con las cámaras y su computadora como única compañía.

Ese día en particular, Jaehyun se despertó con un nudo aún más apretado en el estómago. Había visto en varios noticieros que era el cumpleaños del famosísimo Lee Soohyuk, y no pudo evitar sentarse frente al televisor para ver las noticias. Observó cómo la familia feliz de Doyoung y Soohyuk estaba de lo más sonriente y en armonía, una imagen que le causó una risa amarga más cercana al desespero que a la alegría.

Se levantó bruscamente y abandonó la sala, su mente girando con planes y pensamientos oscuros. Regresó a su habitación y se sumergió en la preparación meticulosa de su plan. Mientras recortaba fotos de Doyoung y las pegaba en una cartulina gigante en la pared, las palabras de Doyoung resonaban en su cabeza: "hago esto por Hangyul y Soohyuk". También resonaban las bromas de sus amigos, "te dejaron por un bebé", una cruel verdad que lo empujaba aún más hacia adelante en la ejecución de su plan.

—Esta vez será diferente. No puedo seguir así —murmuró para sí mismo mientras dibujaba líneas y anotaba nombres en la cartulina.

A medida que las horas pasaban y la madrugada avanzaba, Jaehyun se sumía más y más en su propio mundo distorsionado. El reloj marcaba ya pasadas las 3 de la madrugada cuando finalmente dejó de trabajar en su plan. Se sentó en la penumbra de su habitación, los ojos inyectados en rabia y determinación. Estaba decidido: a la mañana siguiente comenzaría a ejecutar su plan, y lo empezaría con nada más y nada menos que con Hangyul.

[Chat con Jungwoo]

Yo: Buen día Jungwoo,
por favor encárgate de
la sesión el día de hoy,
tuve unos problemas de salud
por lo que no podré asistir.

Jungwoo: Está bien
¿Estás seguro de que solo es
un problema de salud?
Como sea, espero todo mejore pronto:)

Jaehyun suspiró con pesadez y apagó su celular, sintiendo una mezcla de frustración y deseo de desahogarse con alguien. Tenía la urgencia de desatar su furia contra cualquiera que se interpusiera en el camino hacia Doyoung, pero sabía que eso solo complicaría más las cosas. En su lugar, decidió canalizar su energía en ejecutar meticulosamente su plan.

Sentado frente al computador, Jaehyun trazó mentalmente cada paso con una claridad casi metódica. Sabía que Soohyuk solía ser descuidado al llevar a Hangyul hasta la guardería, así que planeó interceptar al niño dos calles antes de llegar, evitando así que Doyoung lo viera. ¿Cómo había descubierto todos esos detalles en una sola noche? Nadie conocía realmente los límites a los que Jaehyun podía llegar.