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Dicen que cuando la vida te da limones; hay que preparar limonada, bueno, los protagonistas de esta historia... no recibieron ese mensaje y por el contrario de lo que uno creería, esos limones les explotaron en las caras ¿Qué a que me refiero? bueno, tal vez quieras sentarte antes de escuchar el resto. A diferencia de las otras historias que ya escuchaste; esta se remonta en el verano del año 2012, la vida era más simple, donde Apple te incluía el cargador y los audífonos en la misma caja de los celulares y estos audífonos eran de cable , los cosméticos de Maybelline eran el último grito de la moda junto con los tacones altos de plataforma y en cuña y no menos importante, el año en el que parecía que One Direction eran los dueños del mundo con apenas un primer disco vendido como pan caliente desde noviembre y con un segundo álbum en puertas (que ya habrían tenido listo si no fuera por la falta de una simple canción... pero ya te enterarás de eso luego). Pero no; ellos no son los protagonistas de esta historia, forman parte de, pero no, los verdaderos protagonistas son nadie menos que Clarissa Jones-Pérez y Jesse Peters ¡oh si! estos dos adorables y muy idiotas adolescentes terminaron metidos en el problema más grande que podrías imaginar ¿no me crees? pues tal vez deberías de seguir leyendo.
-yo puedo reconocer muchas cosas en esta vida ¡pero puta madre! cuando yo dije que quería una experiencia inolvidable en Londres, no me refería a esto- se quejó Clarissa- ya me duelen los pies y seguimos sin saber en donde estamos- -por lo menos aun es de día- comentó Jesse caminando a su lado -eso no sirve de mucho cuando no sabes en donde estás- replicó Clarissa ligeramente molesta
¿Qué que había pasado? a los estudiantes de los Feliz, más en específico; a los chicos del programa de música los habían invitado por el verano a un programa musical en Inglaterra, los habían asignado en los dormitorios de una universidad, Cheltenham, para ser específicos, nadie se imaginó que aquello podría salir mal, es decir ¿porqué saldría algo mal? algunos días de la semana tomaban lecciones de música y composición, otros días salían de paseo por algunas ciudades de Inglaterra y los fines de semana descansaban y podían recorrer los alrededores del campus y alguna que otra tienda que estuviera por allí, enserio no había manera de que algo en ese viaje saliera mal, bueno... si hubo manera y tan hubo manera, que el problema empezó cuando un día que estaban visitando el centro de Londres y más específico en el metro y por andar distraído respondiendo un mensaje a su tía, Jesse se había metido en el vagón equivocado y Clarissa como la buena samaritana que es, había ido tras él para no perderlo de vista y seguir con el resto del grupo, sin imaginar que, las puertas del vagón se iban a cerrar en sus narices y que por consecuencia terminarían perdidos en alguna desconocida parte de Inglaterra, donde en algún punto a Jesse se le había apagado el celular por falta de pila y a Clarissa le quedaba el mismo porcentaje de batería que de paciencia... que era poco.
-quiero a mi mamá- no pudo evitar quejarse la latina por vigésima vez- y también tengo hambre- -si pues ponte en la fila- masculló Jesse ligeramente irritado por tener que escuchar a la chica a su lado quejarse sin parar desde hace rato
