Capitulo 25

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IVÁN

—Esto fue... — tomo un poco de aire para recuperarse —Diferente.

Sonrei mientras fui hasta a ella para besarla. Se acomodaba ese vestido morado que tanto me encantaba.

Era su cumpleaños. Y me tomo por total sorpresa saber, que la muy mocosa estaba cumpliendo diecinueve años. No los aparentaba tener ni siquiera dieciocho cuando la conoci, pero me satisfacía saber que no estaba cometiendo ningun delito cuando tuvimos nuestra primeras veces.

Era obvio hasta ese momento que habia cambiado bastante y se veia mas madura a diferencia de muchas en la preparatoria. Tambien el 14 de abril Owenth, su hermano. Estaba cumpliendo sus cinco meses y el parecido con su hermana era obvia.

Lo estabamos celebrando en uno de los restaurantes mas exclusivo de los Angeles. Regalo de mi hermano. Su madre le obsequio un porta paginas y ella se enojo mucho porque no tenia libros con que utilizarlos.

¡Esa parte era mi culpa!

El mes que ya llevabamos juntos me llevo a conocerla a mucha mas profundidad y lo que en verdad me preocupaba era su enfermedad. Estando conmigo no tenía problemas con eso, pero hubo unas cuantas veces que la encontraba llorando en los baños por eso, no lograba darse respuesta ella misma y las terapias grupales parecían no estarle funcionando como se debía.

Por otro lado yo. Comence a llevarme mejor con mi hermano. Gracias a las platicas nocturnas que teniamos antes de dormir. Todos pensaban que lo que ella y yo teniamos era nada mas que solo sexo, pero con ella jamas llegue a pensar eso. Menos cuando estabamos hablando de nuestros miedos y sueños. Nos apoyabamos de muchas formas y la mejor era cuando hablabamos de lo que nos reprimiamos. Porque nadie me llego a entender como lo hizo ella.

—Si hubiese sabido que la mocosa tenia dieciocho debes de diecisiete cuando me la folle en el hospital, creo que hubiese sido mucho mas erotico contigo esta vez para que no te llevaras la sorpresa— sonreímos

—¿A lo estilo Cristian Greys?

—¡A lo estilo Cristian Greys! — afirmo con picardía.

Elle dedico una sonrisa cansada. Si, lo estabamos ambos. No teniamos ni la menor idea cuanto tiempo llevabamos alli pero cuando salimos. Nos encontramos con su hermana.

—¡Joder! ¿Que hacian en el baño? — nos miro a ambos con intriga.

—fumamos hierba — hablo rapidamente mi novia.

Aun no entendia porque le ocultaba a su hermana que follabamos donde nos presentara la oportunidad. Si era obvio que aquella vez en su habitacion, Alahna habia escuchado absolutamente todo...

—Joder, dejen esa mierda — gruño Alahna un tanto enojada —llevamos media hora esperandolos. Joder.

Avanzo delante de nosotros con determinación. Nosotros lo que hicimos fue vernos a la cara y soltar una risa nerviosa y burlona. Imitando los pasos estrambóticos de su hermana mientras avanzamos a la mesa.

—¿No te apetecen irte a algún lado? — le pregunte.

—Si. Pero hay que quedarnos a cenar y luego a la casa a abrir los otros regalos — me recordo —Ademas, me falta abrir el tuyo.

Me dio un beso rapido a los labios cuando llegamos al pie de la mesa. El camarero, que claramente lo reconocia por habernos visto hace unas horas cuando llegamos aqui, nos atendio rapido y se fue practicamente corriendo. Regalandome una mirada de desconcierto y algo de miedo.

—No me sorprendería si Ivan sabe porque ese camarero dudo mucho en atendernos — comento Alahna por lo bajito.

—¿Tienes algo que decir? — intervino Apolo.

Orgulloso Silencio ©✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora