Cap. 12: "Un encuentro casual"

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Terry había vuelto a la habitación de “Jessie” suspiró al ver las muñecas y comenzó a contarlas una a una, porque en realidad si ella le había dicho cuántas eran, no lo recordaba, justo hacía eso cuando Jessie regresó con la muñeca toda sucia en sus brazos y al verlo se detuvo… de nuevo, había cometido una injusticia contra él y se sentía muy mal por haberlo acusado casi de robo y bueno, afortunadamente, según ella, no había visto a los niños, para esas alturas él se había vuelto a poner el disfraz de Jessie

-¿Qué estás haciendo? – Le preguntó con esa voz dulce modificada por el caramelo

-¡Ah! Cuento… para que no vuelva a pasar lo de hace rato y… - Y cuando le miró, vio que llevaba la muñeca en sus manos y que estaba sucia, imaginó que debía haberse puesto como loca al ver a la muñequita así

-La encontré – dijo “ella”

-¿Dónde?

-Por ahí… sin duda, la tomaron sin permiso, pero no volverá a pasar

Terry se imaginó por un momento que ella se había puesto a discutir con la niña, a regañarle, llamarle la atención, pero al parecer, no le habían dicho que él había estado ahí, y que el lugar no le parecía desagradable, era como un cuarto de niños común, que los niños parecían tan adorables y ¿Normales?

Y de repente… fue Jess el que no pudo aguantarse más y se acercó a Terry valiéndose cruelmente de su disfraz de Jessie y se acercó a él y le besó los labios… ¡Bueno! Eso era lo que siempre había tenido ganas de hacer desde el principio, pero como pensaba que el muchacho era hétero, pues no lo iba a besuquear como Jesse, sino como Jessie

Fue algo sorprendente para Terry, cuando “ésta” presionó sus labios sobre los de él, fue algo como… como si ya lo hubiera echo antes, inclusive tuvo la misma sensación aterciopelada como cuando besara a su hermano a escondidas, pero imaginó que era por que eran hermanos que sus labios se parecían, entreabrió su boca para que Jessie profundizara el beso y rozaran sus lenguas, eso le pareció tan erótico a Terry que se sintió mal por desearla

“Jessie” rompió el beso procurando no excitarse, no sabía por qué, pero Terry lo estaba provocando inconscientemente, casi con inocencia, se sintió mal de haberlo besado porque éste no sabía que era hombre y que Jessie en realidad era él, Jesse y que no tenia derecho a jugar con los sentimientos de nadie más

-Fue para disculparme – dijo Jessie ruborizada – Te acusé injustamente, cometiendo los mismos errores que cometió mi hermano

-No hay problema – sonrió tímido Terry, pero eso si… el mirar el rostro de Jessie, esos ojos tan azules como un zafiro, esa breve sonrisa, el rostro de Jesse se le atravesó y lo hizo sentir mal… tenía que quitarse esas ideas… a él debían gustarle las chicas y el corresponder el beso de ella, lo demostraba, quizás lo del otro, era solo un absurdo… tenía que reaccionar

-Bueno, iré a limpiar la muñeca…

-¿Quieres que yo lo haga? – Carraspeó Terry

-No gracias, es mi responsabilidad

El muchacho pensó en muchas cosas, el porque le tomaba tanta importancia a la muñeca y se la había quitado a la niña, seguramente ella se había quedado llorando por esa situación, contempló el resto de las muñecas ¿Para que querría tantas? Mejor debía darlas a la niña si ella ni siquiera las jugaba ya, pero Jessie era muy extraña también…

-Busco una mascota – dijo aquel hombre con voz grave en la tienda de mascotas mágicas – Algo para niños de cinco años…

-En… enseguida le traigo el muestrario – tartamudeó la dependienta de la tienda de mascotas perturbada con la belleza de ese hombre, de mirada seria y serena, ojos hermosos, con un cabello espectacular posado sobre su rostro y unos labios preciosos que no esbozaban ninguna sonrisa en esos momentos y parecía que nunca

Morphine, Blasphemy, SephirotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora