Cap. 27: "Solo serás para mi"

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-¡Amorcito, ya estoy aquí! – Canturreó Anya cuando entró a la habitación de Cedric y éste alzó una ceja ¡Igualada esta! ¿Cómo que amorcito? Pero ella sonreía con mucho descaro y fue a aventar sus cosas a la habitación correspondiente y luego salió con su andar coqueto y cadencioso, suspiró y le echó unos ojotes al castaño como si quiera desnudarlo y devorarlo enterito

-No te pases – Dijo entre dientes

-Tiene razón mi amo, es que me emocioné – Y se acercó mirándolo con un suspiro contenido - ¿Y como dice que te va sin mi? – Sonrió mientras se mordía los labios pensando si su otro yo, en el más allá, se lo haya encamado – Pero bueno, ya estoy aquí para consentirte en todo lo que quieras, soy toda tuya

-Si, bueno… ya veremos – susurró un poco confuso y se sentó en la cama para terminar de ponerse los zapatos

Pero Anya no se iba a quedar con las ganas, lo conocía desnudo, le había cuidado en sus enfermedades, casi, casi era una esposa, solo le faltaba reconquistarlo, así que bueno, la chica se inclinó hacia él atrapando su rostro y besándole esos labios resucitados que sabían a gloria, éste abrió los ojos como platos al sentir como ella invadía su boca y le metía lengua haciendo más íntimo el beso

-¡Oye! – Se hizo hacia atrás cuando recupero la cordura mirándola con esos ojos grises bien abiertos y con el corazón latiendo a mil por hora

-Solo es un besito de bienvenida… para mí… de parte tuya… ¡Ah! Ahora a limpiar mientras tú te vas a tus deberes escolares, aquí estaré esperándote, solo a ti, corazoncito

-¡Oye! ¿Por qué tanta confianza?

-¡Vete ya! – y le dio una nalgada mientras que ella se iba levantar la ropa sucia y seguir como si nada mientras que el castaño salía todo confundido, besuqueado, nalgueado y casi, casi manoseado, es más, desnudado por la mirada de esa mujer

Pero en el fondo, como que había algo distinto, no solo era igualamiento por parte de Anya, era algo más, la confiancita era excesiva y descarada, lo peor es que a pesar de que se molestaba, tampoco lo era para tanto, intuía que algo pasaba pero que quizás tardaría en averiguarlo, además, el que regresara ahí significaba muchas más tentaciones

Pero eso bastó para que Cedri estuviera pensando en ella todo el maldito día, que si sus besos, su sonrisa, su sexapil y todo lo que conllevaba, eso le ponía de malas, porque no era posible que esa mujer le alterara tanto

-¡Hola Cedric! – Le salió al paso un ángel oscuro – Me llamo Tyra…

-Aja – masculló él mientras intentaba llegar a su salón de clases

-No seas tan remilgoso, tú y yo podríamos pasarla bien, creo que los dos somos perfectos y el uno para el otro – Le sonrió y le tomó de la barbilla y él se revolvió para quitarse sus manos de encima y frunció el entrecejo

-La verdad es que no me interesa estar contigo – le respondió Cedric – suficientes obligaciones tengo como para tontear por ahí

-¿Y quien habló de tontear? – Susurró – Yo quiero algo serio contigo, eres tan hermoso, perfecto, creo que los dos haríamos el amor de modo increíble ¿O que? ¿Te estás manteniendo puro para alguien? Porque huelo en ti, que no han pasado las manos femeninas, nadie ha dejado aún su aroma, yo que pensaba que eras un amante insaciable y me encuentro con un corderito – sonreía mientras que alguien escuchaba a sus espaldas

-Mi vida sexual no te importa, no tengo tiempo para estupideces, si pensabas solo en fornicar te hubieras ido a Saint City, ahí si que todos son más libertinos, por nuestra parte angelical, los nefilim no pensamos en estar acostándonos con quien se nos ponga enfrente, un nefilim entrega solo una vez verdaderamente el corazón… ¿No sabías eso?

Morphine, Blasphemy, SephirotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora