CAPÍTULO 19

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Holaaaaa :)

¿Qué tal?

Por desgracia, ya aparece el misterioso. Aunque quizá no parezca en un principio tan odioso.

Anda, me he levantado poeta.

No voy a decir lo siguiente, eso es trabajo de Kelly.

Disfrutad del capítulo <3

Ya es lunes.

Menuda mierda.

Por fin coincidimos en algo. Sigo sin saber qué significaba aquella frase, y la verdad es que me causa bastante intriga.

A mí también. Quizá porqur a fin de cuentas seamos la misma persona.

Lo buscaría en el traductor, pero no sé escribirlo. Aunque lo más probable es que me haya insultado o algo así.

Ya ya...

Bueno, en realidad no sé qué me provoca más intriga, si la frase o la forma en la que Arlen conoció a mi hermano. Aunque según él hace gracia, por lo que no creo que se hayan conocido peleando contra una mafia.

La frase causa más curiosidad.

No estoy de acuerdo, pero bueno. Además, no todo es misterio y cosas malas, una cosa buena es que Mario ya ha vuelto de sus vacaciones, por lo que ya no tengo que suplicarle a nadie que me lleve y tampoco tengo que ir en bus, y la verdad es que mejor, porque creo que la gente no sabe lo que es la higiene personal.

Ya he terminado las clases de hoy y estoy a punto de irme cuando escucho una voz a mis espaldas.

—¡Eh, Kelly! ¡Espera! –oh, esa voz... ¿Acaso es...?

Sí, estúpida. Es él.

—¿James? –pregunto nerviosa–. ¿Qué... qué pasa?

—Hola, Kelly –dice dedicándome una de sus brillantes sonrisas–. Me preguntaba si este viernes tienes algo que hacer por la noche.

Meh, demasiado típico.

Me quedo perpleja, ¿yo? ¿Con el tío más cotizado de la universidad y encima mi crush? Debo estar soñando.

Te pegaría para comprobarlo, pero no tengo forma física.

Gracias por ser tan considerada, conciencia.

Un coro de personas nos rodea, curiosas.

—¿Yo? –pregunto incrédula–. ¿Es una broma?

—Sí, tú –dice asintiendo con esos ojazos marrones tirando a miel–. Y claro que no es una broma.

Miro a mi alrededor en busca de alguna risita o algo, pero veo que todo el mundo está igual de atónito que yo.

Vuelvo mi vista a James. Rubio rojizo de ojos azules, metro ochenta y cinco y un cuerpo muy trabajado. El crush de media universidad. Y mío también.

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