🌧Cap 38👩🏻

7 5 0
                                    

Detrás de la máscara

En el claro del bosque apartada de las casas improvisadas se encontraba Darya sentada en el suelo, había terminado de desollar el cuerpo de Germokis y con las escamas creó una capucha para Lash.

-Listo, de seguro estará muy feliz cuando vea esto -la chica alegre se levantó observando con alegría su creación mientras se secaba el sudor de la frente.

Detrás de ella apareció el guardaespaldas de Danzel, el cual había sacado su daga y se acercaba silenciosamente hacia la demonio, una ves estuvo a su espalda lanzó un tajo con su arma directo al cuello de la chica, pero esta se dio cuenta y rápidamente giró su cabeza agarrando el filo del arma con los dientes rompiéndolo en pedazos de un bocado sorprendiendo al chico, luego el enmascarado recibió un fuerte puñetazo ascendente en el abdomen escupiendo sangre por debajo de la mascara, retrocedió un poco dañado, pero la chica no esperó y enseguida agarró su rostro apretando con fuerza destrozando su máscara dejando a la vista su rostro y estampándole contra el suelo.

-Debo admitir que eres bastante silencioso, lo suficiente para engañar a un humano, pero no a mí -dijo la chica sonriendo mientras apretaba más su agarre enterrando sus garras en la piel del chico-, ahora me vas a decir que coño pasa aquí.

-Danzel... sabe que son el grupo que viaja con El Demonio de La Luna Roja... no van a salir vivos de aquí... -sonrió haciendo enojar a la chica que estuvo a punto de reventarle el cráneo, pero sintió un ruido y se separó rapidamente, un disparo a toda velocidad rosó su cabeza causándole una herida poco profunda.

La chica observó con cuidado, pero no veía nada a su alrededor, nerviosa vio como el guardaespaldas se ponía de pie y reía como desquiciado.

-¿Qué diablos está pasando? -preguntó la chica sin saber de donde la atacaban.

-Nuestro profeta es un mensajero de dios, y yo soy su guardian, está claro que eso es suficiente para que me proteja -alzó sus manos mirando al cielo luego las bajó mientras mostraba una sonrisa siniestra-, recibe la lluvia dorada como castigo del cielo.

De repente una lluvia dorada tal como dijo comenzó a caer, eran proyectiles pequeños, pero rápidos y potentes que rodearon a la chica, esta agarró su katana y la capucha de Lash tirándosela por encima bloqueando los disparos que rebotaban causando gran dolor, pero sin atravesar las escamas negras de la capucha, Darya desenvainó su espada atravesando la lluvia de fuego para llegar al sujeto y atacarlo con un tajo rápido, pero saltó y lo esquivó, luego en un rápido movimiento con lo que quedaba de su daga la enterró en el hombro derecho de la chica, presionó con un dedo la base del arma y sorpresivamente lo que quedaba de filo explotó destrozando el brazo de la demonio y causándole gran dolor, rápidamente la chica se giró lanzando un tajo horizontal que golpeó al sujeto causándole un gran corte en el pecho por el cual empezó a sangrar, aunque a pesar del dolor y la sangre que brotaba de su boca seguía riendo.

-¿Qué fue lo que hizo? -se preguntaba Darya acomodando los huesos heridos de su brazo aunque le doliera-, su arma... explotó, primero la lluvia dorada y ahora esto -la chica miró un momento al suelo y vio pequeños objetos ovalados de color dorado-. ¿Es alguna especie de herramienta, pero de dónde viene? -intentó mirar al cielo, pero los rayos del sol la cegaban impidiendo ver la causa del ataque.

-No tienes que darle más vueltas, son los simples rayos divinos que nos protegen -habló el sujeto frente a la chica, se notaba bastante herido, pero su expresión maquiavélica no cambiaba.

-La capucha me protege de la lluvia -agarró la capucha y la colocó mejor sobre su cabeza, luego se puso en posición sosteniendo su katana con la mano sana, comprobó que podía mover los dedos de su otra mano, expulsó algo de fuego y se preparó para atacar-, aunque tenga una mano será suficiente, con mi velocidad, puedo... llegar en un segundo.

El Demonio de La Luna RojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora