Eterno Presagio - Klaus Mikaelson

Capítulo 30

Cuando desperte Klaus no estaba a mi lado, suspire y note que ya era de día.

Tome mi teléfono y vi la cantidad de mensajes que tenia de mis hermanos, ya era demasiado tarde y debía llegar a la preparación del concurso de Miss Mystic Falls, le había prometido a Caroline que la ayudaría.

Levante mis cosas del suelo y me cambie con rapidez, me puse mi vestido y note que mi sostén estaba roto tirado debajo de la cama. Suspire con molestia y me puse los zapatos apurada.

- ¿Huyes? - Pregunto Klaus saliendo del baño.

Tenía el cabello mojado y una toalla cubría de su cintura para abajo, aparte mi vista de él e intente alejar cada pensamiento imprudente que cruzo mi cabeza.

- Debo llegar a la mansión Lockwood, le prometí a Caroline que la ayudaría con la preparación del concurso - Le explique sin mirarlo.

Camino hacia mi y tomó los restos de mi sostén que estaban sobre la cama, lo miré por unos segundos molesta y luego terminé de ponerme mis botas.

- Disculpa - Dijo con burla.

- ¿Tienes idea de cuanto me salio? - Le pregunté tomándolo de su mano.

- Puedo compensartelo - Dijo y me tomó de la cintura. - Llegaras a tiempo para ayudar a la rubia - Me aseguró rozando su rostro con el mío.

- Yo creo que no - Dije poniendo mi mano en medio de su rostro y empujándolo.

Suspiro frustrado y comenzó a cambiarse, salí de su habitación con prisa y note que todo estaba demasiado silencioso en esa casa.

- Dime a que hora paso por ti mañana, sabes que soy puntual - Me aviso apareciendo detrás de mi.

- ¿Dispulpa? - Pregunte.

- No sacrifique a uno de mis híbridos porque si, Stefan dijo que necesitarías una cita para el evento y me pareció una fantástica idea - Dijo el original.

Lo observe asombrada, mi propio hermano me había vendido.

- Como sea, nos vemos mañana - Dije abriendo la puerta dispuesta a salir.

Él llegó a mi con rapidez y cerro la puerta, se quedó observándome con una sonrisa.

- Klaus, debo irme, Caroline me va a matar si yo... - Dije pero me interrumpió.

Me tomó de la nuca y estampó sus labios contra los míos con necesidad, le correspondi el beso y al apartarme sentí que estaba sonrojada.

- Te ibas sin despedirte - Dijo abriéndome la puerta y dejándome salir.

Suspire anonadada y salí de allí.

- Te veo mañana, Lot - Dijo con entusiasmo.

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Me pase toda la mañana ayudando a Caroline, ella estaba muy estresada y molesta porque Stefan no vendría. Parece que las cosas entre mi hermano y Elena habían terminado, intenté llamar a Stefan para ver como estaba pero no respondió.

Cuando por fin terminamos con los preparativos me fui a casa para descansar, allí me encontré con Damon y al verlo supe que ya lo sabía.

- No tengo idea que fue lo que sucedió pero más te vale que no molestes a Stefan - Le advertí.

- Yo no he hecho nada - Dijo a la defensiva.

Suspire y me acerque a él.

- Se que la amas, Damon, pero no quiero que pelen por esto - Dije.