CAPÍTULO CINCUENTA Y OCHO¡Esa hamburguesa era maravillosa!
La carne súper bien sazonada y cocida, el pan suave y dorado, las salsas caseras súper especiales, la cebolla caramelizada y la ensalada de repollo, todo, todo en ese bocadillo era perfecto y combinaba tan bien que quería comer unos tres más.
—¿Te ha gustado?
—¡Esto está increíble! —Seth terminó hablando con la boca llena y se ensució todo en remojo mientras hablaba. —¡Dios mío, eso es muy bueno! ¡¿Cómo es posible que una cosa sea tan buena?!
—Te dije que te iba a gustar. —Cassie se rió suavemente y extendió una servilleta al lobo. —Aquí, hay salsa en tu mejilla.
Seth agradeció con la cabeza y se limpió la mejilla –y trató miserablemente de limpiar la blusa que estaba manchada–, había derramado casi toda la salsa en sí mismo, una pena porque esa salsa era muy, muy buena.
El lobo no tardó en terminar de comer sus bocadillos, dejando solo la mitad del vaso de jugo de naranja, pero luego se aseguró de llamar a cualquier camarero y pedir otro bocadillo.
Eso estaba muy bueno.
—Creo que a alguien le gustaron los bocadillos.
Para la falsa tristeza del hereje, Henrique fue a llevar el segundo bocadillo a Seth: —Esta vez la salsa vino en la olla, intenta sumergir la hamburguesa aquí y luego morder.
Seth bajó la cabeza súper avergonzado y murmuró cualquier cosa para que el hombre saliera de la mesa pronto, que por supuesto, ignoró el murmullo e inventó cualquier tema para comenzar una conversación.
—Vas a querer más...
—Eso es todo Henrique, puedes irte ahora, gracias. — Seth estaba seguro de que si el hombre no se iba, Cassie lo arrastraría lejos. —Ve a atender una mesa, o algo así.
—No es necesario...
—Sí que lo es. —Cassie se comió una patata. —Henrique es muy entrometido.
Seth hizo una pequeña nota mental, no jugar con personas importantes para el hereje: —Está bien.
Mientras Seth comía feliz su otro bocadillo, Cassandra todavía estaba a la mitad de la primera, pero sus patatas estaban casi agotadas. Las patatas eran muy buenas y aunque los bocadillos eran mucho mejores, el hereje prefería comer las patatas fritas, o cualquier cosa que estuviera hecha de patata primero, la patata era una de sus mayores pasiones.
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𝑶𝑪𝑬𝑨𝑵'𝑺 𝑬𝒀𝑬𝑺, 𝚜𝚎𝚝𝚑 𝚌.
Fanfictionᴏᴇ| ❝In all my years of life I have never loved anyone as I love you❞ Edward Cullen se casa con Isabella Swan y llama a una vieja amiga para que sea su dama de honor. Cassandra Gold, una hereje de 445 años que ayudó a Edward en la década de 1920, te...