POV FREEN
Becky y yo pasamos la noche haciendo el amor, fue una noche maravillosa, ella fue tan dulce, tan delicada y tan pasional al mismo tiempo, nunca me había sentido tan plena, tan feliz, ella supo exactamente que hacer, pareciera que conociera mi cuerpo desde siempre, me sentí cuidada, respetada y muy deseada.
No puedo evitar sentir nostalgia, no sé que estoy sintiendo por ella, lo que si sé es que ya hoy regresamos al crucero que empieza su viaje de regreso y tengo una sensación de tristeza porque el futuro es demasiado incierto para las dos. Si soy honesta conmigo misma, una cosa es en el crucero, otra muy diferente es cuando vuelva a mi realidad.
Las cosas en mi vida no son tan fáciles, siempre he sido manipulada por mis padres para hacer su voluntad, siempre he tenido que ser la hija perfecta, tener el matrimonio perfecto, la madre perfecta.
Yo lidero la empresa más grande de mis padres, soy la presidenta y me encargo de muchas sucursales, mi nombre es reconocido en el ámbito económico del país, así como Heng que se encarga de manejar las empresas de su familia, nuestro matrimonio fue más por darle gusto a nuestras familias que por otra cosa.
Estoy perdida en mis pensamientos, cuando siento que tocan la puerta de la habitación, Becky se despierta por el ruido, yo me levanto y me acerco a la puerta y noto que es Heng.
- Que quieres? Le digo.
- Necesito hablar contigo.
- Nos vemos en el puerto cuando vayamos a embarcar, le respondo. El acepta y se va.
Tenemos poco tiempo para prepararnos e irnos al crucero, Nos arreglamos, recogimos todo y nos fuimos.
Al llegar al lugar Heng estaba ya ahí, tenía cara de pocos amigos. Me dijo que necesitaba hablar con Becky para cuadrar lo del pago, pero que tenía una condición.
Que el le iba a pagar como había quedado conmigo, pero que debía dejar de pretender que el no existe, que el era mi marido y que me comportara como lo que era, su esposa. Que el había conocido unos empresarios allí durante el viaje con miras a consolidar unos negocios y habían quedado en cenar con ellos y su familia. Que si quería que le pagara a Becky tenía que ir con el.
Me puse furiosa, Heng se estaba comportando como un idiota, pero no pude negarme, quiero que le pague a Becky, se que ella necesita mucho el dinero y sé que si yo le pago no lo aceptará o pensará mal.
Básicamente el tener que ir con Heng y estar con el nos apartaba a las dos, no podría estar con ella esta noche, tampoco hemos hablado de que pasará cuando estemos en nuestra ciudad.
Embarcamos y el crucero emprendió el viaje de regreso, mañana al medio día estaríamos en la ciudad portuaria donde empezamos esta aventura.
Heng se sentó a nuestro lado, todo el tiempo estuvo cerca, como si no quisieran quitarse de mi lado, sospechará algo?... Me puse nerviosa de sólo pensarlo.
Llegó la noche y tal como me dijo, fuimos a cenar con los empresarios y su familia, yo solo podía pensar en Becky, en que estaría sintiéndose ignorada por mi después de que hicimos el amor toda la noche, pero esto más que nada lo hacía por ella.
En este momento odio a Heng. Pero aquí seguía yo sentada Jugando a ser la gran esposa, fingiendo una gran sonrisa con estos desconocidos.
Muy tarde de la noche, la cena terminó y para mi mala suerte quedaron en desayunar para fijar detalles del negocio que pensaban hacer cuando ya estuviesen en la ciudad. No tuve otra que aceptar.
Heng seguía pegado a mi, me dijo que durmiera en la habitación que no quería que se enteraran los tipos del negocio que estábamos mal, que el dormía en el sofá que estaba en el cuarto, pero que durmiera allí.
Cuando despertamos nos cambiamos y fuimos al restaurante, ya estaban todos allí, pasaron las horas y la conversación seguía, cuando terminó nos dimos cuenta que ya estábamos en la ciudad costera, que habíamos llegado.
Me sentí mal, terriblemente mal. Becky pensará lo peor de mi, que solo quería satisfacer mi curiosidad y que la ignoré después, se que hice mal, debí buscar la manera de explicarle porqué estaba con Heng y todo lo que había significado esa noche para mi.
Ella ni me miraba, se veía herida, ni siquiera me dirigía la palabra y la verdad me lo merecía.
Bajamos del crucero y fuimos al lugar donde habíamos dejado la camioneta. Heng nos dijo que fuéramos al restaurante. Fuimos y de verdad el ambiente era demasiado incómodo. Nos sentamos y el le pidió disculpas a Becky, ella estaba en silencio y solo asentía.
Al final Heng sacó la otra parte del dinero que faltaba por pagarle, ella me miró de una manera que no supe como interpretar, pero no se veía nada bueno en sus ojos, más bien como reproche.
- Por favor acéptalo le dije.
- Si Mon, este fue nuestro acuerdo, Dijo Heng.
Becky tomó el dinero y lo guardó en su bolso, Salimos del restaurante y nos fuimos a la camioneta, para empezar nuestro camino de regreso a casa.
Las 3 horas de viaje Becky se hizo la dormida, buscaba su mirada por el espejo retrovisor pero fue en vano...
Me lo merezco, tiene que estar pensando que soy una mierd* de persona, me porté mal ante sus ojos, siento que la herí y yo solo deseaba que ella obtuviera su dinero que tanta falta le hace para ayudarse en sus problemas.
Llegamos al mismo lugar donde la recogimos, Heng se bajó y sacó sus maletas, extendió su mano con formalidad y le dio las Gracias, le pidió perdón por su comportamiento y le deseó suerte en su vida, yo me bajé y la miré, sus ojitos estaban cristalizados, los míos igual.
Sentía un dolor horrible en mi pecho, pensar que más nunca la vería y que se llevara con ella esa horrible impresión de mi, cuando ella me dio momentos de felicidad.
No aguanté más y la abracé delante de Heng, como despedida, le susurré en el oído que Nunca la Olvidaría y que me perdonara. Ella se apartó de mi y empezó a alejarse con su maleta.
Yo quería llorar pero no podía, Heng estaba ahí. Mi corazón sentía que se partía en pedacitos de saber que no la volvería a ver...
Ella Volteó con sus ojitos llorosos y yo le dije adiós con mi mano y las lágrimas rodaban por mis mejillas mientras mi marido estaba a mi espalda.
Hola aquí les dejo este capítulo. Gracias por leerme ♥️
Mi Becky 🥺💔
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EL CIELO TE MANDÓ PARA MI ( FREENBECKY)
Storie d'amoreEL CIELO TE MANDÓ PARA MI Mi nombre es Rebecca Armstrong y quiero compartirte esta historia que hace parte de mi vida... Tenía 18 años estaba en la discoteca y decidí salir a fumar, me fui al callejón para poder fumar tranquila cuando veo venir c...