ÁNGELA
Fui a la recámara y me puse un vestido. Bajé enseguida para esperar a Connor en la puerta.
Cuando llegó, mi corazón se calmó al verlo entrar con nuestra hija entre sus brazos. Corrí y la besé en la frente y luego lo besé a él.
—"¿Qué pasa, amor?"
—"Te diré en un lugar privado". —Miró a la niñera de mi hija.— "Llévate a Alaia a la habitación y no salgas con ella hasta que yo te lo diga".
—"Entendido".
—"Mami".
Miré a Alaia, que me abre los brazos para que la tome. Lo hago.—"No te preocupes, cariño, si te quedas con Alba, te llevaré de compras".
—"¿En serio? Podré tomar todos los juguetes del mundo".
—"Claro que sí, cariño".
Se la pasó a Alba y miré cómo se lleva a Alaia. Me giro hacia Connor.
—"Cuando investigaste a Donato Castillo, ¿te enteraste de que tenía familia?"
—"No, solo su hijo".
—"Maldición".
—"¿Me vas a decir qué diablo está pasando?"
—"Recibí una llamada de un hombre que dice ser hermano de Donato y amenazó con hacerle daño a mi familia".
Connor me trajo hacia sus brazos. —"No te preocupes, mi amor, no dejaremos que se acerque a Alaia".
—"Tenemos que saber quién demonios es".
—"Voy a mandar a investigarlo de nuevo; quizá por los celos solo investigue a su hijo".
—"Tienes que hacerlo hoy".
—"Max".
Connor llamó a su mano derecha, quien apareció luego de un minuto.
—"Dígame, Sr. Tynes".
—"Investiga a Donato Castillo otra vez, averigua si tiene familia. Necesito que me traigas hasta cómo diablo se llamaba su bisabuela".
—"Enseguida".
Connor me agarró la cara con sus manos. —"Tranquila, lo voy a matar antes de que se acerque a nosotros".
—"Tenemos que estar preparados para todo; manda a poner más seguridad".
—"Eso haremos, mandaré a buscar a los militares".
—"Vamos con Alaia, necesito tener a mi hija en mis brazos".
Fui a la habitación de mi hija; su cuarto estaba lleno de juguetes. Su padre y yo le compramos casi una habitación llena de juguetes.
Ella me vio, tiró la muñeca y corrió hacia mí. —"Mami".
Connor entró a la habitación. —"Vamos a la habitación".
Me giro hacia Alba. —"Quédate en la casa, no salgas".
Ella me asiente y yo salgo con Alaia en brazos y Connor detrás de mí.
—"¿Qué haremos hoy?"
Miro a Alaia, quien acaba de hablar. —"Vamos a pasar tiempo, papá, tú y yo. ¿Qué quieres hacer?"
—"Podemos ver una película, quiero ver a las princesas".
—"Hoy haremos lo que tú quieras".
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DESTRUCCIÓN © {2}
AçãoÁNGELA CRANE Dicen que después de la tormenta llega la paz, pero en mi vida es después de la paz llega la guerra. Conmigo hagan lo que quieran, pero si tocan a mi hija, se armará la puta guerra. CONNOR TYNES Mientras viva, nadie en este mundo se atr...