-Oh Mierda...- Jiwoo intentó abrir los ojos con dificultad, su cabeza se sentía pesada y con una fuerte migraña- ¿Santo Dios, quién demonios me golpeó anoche? Me duele todo...
-¿¡Puedes bajar tu puto volumen!?
Sé giró al escuchar el gruñido en susurró. Esa voz la reconocería a kilómetros.
- ¿Lily?- Entreabrió los ojos para buscarla mejor, pero los cerró de inmediato. La escasa luz en ese momento le afectaba tanto como si mirase fijamente el sol.
Se frotó y volvió a abrirlos. Se sorprendió al ver el lugar en el que había dormido.
-Con razón me duele la espalda- Murmuró con pesadez. El sillón de Lily no era demasiado cómodo, pero por lo visto había dormido mejor que su amiga.
Lily a diferencia de ella se encontraba en el piso, quien usaba su brazo como almohada. Su pelo estaba enmarañado, pero lo que captó su atención fue su cuerpo semidesnudo.
-¿Pero qué...?- Bajó la mirada por el suyo y sus ojos se ampliaron al descubrirse en las mismas condiciones que la tailandesa- ¡Morrow! Ese grito retumbó en los oídos de la bailarina, quien casi sintió su cabeza estallar.
- Por Dios...- Sollozó sujetando su cabeza como si se le fuese a caer- ¡Maldición Woo!
-¿¡Lily Jin Morrow, explícame por qué estamos desnudas en tu puta sala!?
Lily entreabrió los ojos sin entender. Miró el cuerpo de su amiga en ropa interior, y luego el suyo. Dejó de lado su resaca y corrió hasta el espejo de cuerpo completo cerca de la entrada.
-¿¡Ay Dios mío, no me digas que te folle!?
-Yo no...
-¡Santa Mierda, esto no debe estar pasándome!
Jiwoo frunció el ceño y se cruzó de brazos, ofendida.
-Oye, que tampoco es lo peor que podría pasarte, mi sexo es una maravilla- Se cruzó los brazos ofendida- ¿Y por qué eres tú quien me folla y no al revés?
Lily arqueó una ceja, irónica, como si fuese lo más obvio del mundo
-Kim, eres más pasiva que la palabra, tu trabajo de psicóloga lo prueba
-¡No metas mi trabajo en esto!
-Como sea... ¿Qué sucedió?
Ambas intercambiaron miradas y las imágenes empezaron a invadir sus mentes.
Flashback
Después del whisky habían cambiado a Ginebra y aquello fue el punto final para su cordura. La psicóloga ya no pensaba con coherencia, sus actos eran deliberados.
-¡Soy una jodida stripper!- Chilló con dificultad sobre la mesa mientras se quitaba la blusa- ¡Atrápala Morrow!
Pero la rubia estaba demasiado ocupada comiéndose a la castaña. Sus bocas luchaban por dominar la batalla y ninguna estaba dispuesta a perder.
-¡Malditas, dejen de intercambiar saliva en mí presencia!- Gruñó bajándose de la mesa, y en el intento cayó de bruces al suelo- ¡Mierda!
Alzó la mirada y notó a Jinsol centrada en la botella. Ella había optado por beber y seguir bebiendo.
-¿¡Qué coño haces!?- La reprendió Jiwoo, levantándose a duras penas- ¡Comparte esa botella!
-¡No!- Se quejó la coreana abrazando con posesión el licor- ¡Es mía!
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Me enamoré de mi gata > HaeLy
FanfictionLily había tenido una fuerte discusión con su novia, Kyujin. ¿Cómo había sido capaz de besar a Eunchae?. Maldita coreana Se sentó en una desgastada banca del parque y contempló las estrellas. Pero no contaba que por un deseo su vida daría un giró in...