Ámame como tu lo haces

Capitulo 6

Al día siguiente Becky se alistaba para ir a la reunión con Freen Chankimha, solo le faltaba un poco de su fragancia de cítricos que amaba, iba enfundada en un sencillo vestido color rosa y pequeños detalles en negro, algo ajustado a su cuerpo marcando cada una de sus curvas, un maquillaje suave hacían resaltar sus hermosos ojos castaños. Se miro una última vez en el espejo de cuerpo completo, se dio una pequeña sonrisa y salió de su departamento tomando las llaves de su auto.

Media hora después Becky se encontraba parqueado su auto en un lujoso departamento rodeado de hermosas flores, lleno de colores por la cantidad de flores y un aroma riquísimo ,era hermoso. Bajó mirando todo su alrededor mientras caminaba hacia la entrada de ese hermoso departamento.

Desde el interior del departamento Freen la miraba embobada, ella era hermosa, era un poco mas baja de estatura que ella, su cabello castaño con unas pequeñas ondas en las puntas, sus ojos, Freen estaba perdida en sus ojos, sabía que esa mujer causaba en ella lo que hacía mucho no sentía por una mujer y estaba segura que no solo eso sino que nunca había sentido tanta intensidad por una mujer, ni siquiera por la mujer que la hizo no creer en el amor "Heidy". El sonido del timbre la saco de todos esos pensamientos, al saber que ella está del otro lado de la puerta esperando ser atendida, ese día pidió al servicio que había contratado que se tomarán el día, ella quería atender a solas a esa mujer sin que nadie molestará.

Caminó hasta la entrada y abrió la puerta, le sonrió y sintió que su deseo aumentaba al ver su sonrisa, el aroma a cítricos inundar sus fosas nasales y escuchar su voz, al fin escucha su voz sin llanto de por medio, sin nerviosismo.

—¡Buenas tardes Freen!— saludo Becky algo avergonzada, intimidada ante la mujer de ojos miel que tanto le llamaban.

Freen al escuchar su nombre en los labios de esa belleza, provocó un deseó que empezaba a desesperarla.

—¡Buenas tardes Becky!... Adelante, no te quedes ahí— hizo un edema con su mano invitándola a ingresar, era educada pero también quería mirar ese culo bien respingón que poseía esa belleza. Trago con fuerza cuando la vio caminar y como ese pomposo culo se movía, pero tuvo que desviar su mirada ya comenzaba a sentir una erección y eso no estaba bien, claro que no, debía sujetarse y recordó en la situación que la había encontrado el día anterior, cayendo en cuenta que estaba actuando como una cavernícola.

-Debes ir lento, ella no es como todas esas que sueles cogerte para saciar tus necesidades- le dijo su conciencia

—Ven vamos a estar más cómodas en el comedor que en el despacho — ella solo asintió y caminaron juntas hasta el comedor, cuando llegaron ella dejo los planos sobre una mesa que había en el centro del lugar rodeada de unas hermosas sillas, miro todo su alrededor apreciando lo sencillo pero elegante que se veía la decoración y por el gran ventanal vio el hermoso jardín lleno de diferentes flores.

—¡Qué hermoso lugar!. El jardín..— señaló con su pequeño índice y miro a Freen para darse cuenta que ella no le quitaba los ojos de encima, sonrió algo tímida y le dejo saber que era lo que pensaba del lugar — El jardín es precioso, tiene tantos colores y flores me encanta.— volvió a mirar a Freen que en ese momento tenía una hermosa sonrisa dibujada en su rostro -Dios esta mujer es hermosa- pensó y se quedó sin poder hablar o moverse del lugar.

— Puedes venir a disfrutar de esta vista la veces que quieras— Freen sonrió y le hizo una seña a Becky para que tomara asiento y ella salió de su trance de mujer babosa y camino nerviosa escuchando lo que ella le ofrecía — ¿Te puedo ofrecer algo? ¿Té, café, alguna rebanada de pastel?— corrió la silla para que ella tomara asiento esperando a que ella decida que era lo que más apetencia. Becky elevo el rostro y le sonrió ¿Cómo era posible que fuera tan sexy ? Pensó, se aclaró la garganta y hablo.

— Si el pastel es de chocolate me encantaría una rebanada de el y me encanta acompañarlo con café.— paso sus manos sobre la falda de su vestido, para secarlas un poco estaba nerviosa y le sudaban las manos a más no poder.

—¡Excelente!... Acomódate tranquila yo iré a preparar todo, hoy mi servicio tienen el día libre.— sin decir más salió hasta la cocina. Dejando a una Becky algo nerviosa y sin ella desearlo empezó a sentir miedo de estar a solas con una mujer desconocida, claramente le da mas miedo los hombres, pero en este punto en el que se encuentra cualquier persona la asusta, más que no había nadie más que ellas en ese departamento, con manos temblorosas tecleo un WhatsApp a su amiga.

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Yo: -Bea estoy en casa de la señora Chankimha, tengo miedo me dijo que estábamos solas y tengo miedo, siento que me va a dar una crisis....Dios Bea que hago?

Bea: -Bec tranquila la señora Chankimha no se ve de ese tipo de persona, recuerda ella te salvó de que Nop llegará más lejos. RESPIRA POR DIOS! Toma esa pastillas que a veces usas cuando te sientes así. Pero de todas maneras pásame la dirección de la señora y pon el móvil con el marcado rápido para llamarme.

Yo: -Se que me defendió, solo que ya no confío en nadie, ahora me tomaré ese medicamento. Odio sentirme así B me siento fatal.

Bea: - Te entiendo lo sabes, pero no todos las personas somos demonios. Te amo, ahora demuéstrale a esa belleza lo buena que eres.

Yo: - Loca del infierno 😅😅 yo también te amo, gracias ♥️

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Freen ingreso al salón cuando Becky justo estaba sacando su mediación desde su cartera y colocaba una píldora en su mano, ella frunció el entrecejo, notando un leve temblor en sus manos. Becky levanto su vista y se encontró con Freen que sostenía una bandeja de plata con la taza de café humeante y porción de pastel, sonrió algo tímida viendo que Freen avanzo hasta la mesa y dejo la bandeja en ella.

‍​‌‌​​‌‌‌​​‌​‌‌​‌​​​‌​‌‌‌​‌‌​​​‌‌​​‌‌​‌​‌​​​‌​‌‌‍—¿Te sientes bien? — le señalo la mano donde Becky tenía la pastilla —

—¡Oh!... Si, si es solo que...— llevo aire a sus pulmones y decidió decir una verdad a medias— A veces sufro de ansiedad, ataque de pánico, locura como quieras llamarlo— trato de sonar lo más tranquila y sin darle tanto importancia a todo lo que estaba sintiendo — Entonces me tomó una de estas, para no enloquecer.— río algo nerviosa, sintiendo su mirada sobre ella. Ella quería saber que la había puesto así, si anteriormente ella estaba tranquila.

—¿Agua?—le pregunto mirándola fijamente, vio que ella le afirmó con un movimiento de cabeza y camino hasta la cocina por una vaso de agua, regreso tranquila pensando como hacer para que ella le diga que fue lo que la hizo poner así . Le extendió el vaso de agua y la observó mientras lo tomaba, se sentó frente a ella sin dejar de mirarla, respiro profundo y tomo el valor para hacerle esa pregunta que le rondaba desde el primer día que la vio. —¿Él Licenciado Racht... él porque...— no alcanzó a formular la pregunta ya que Becky se paró como un resorte de la silla mientras juntaba sus cosas.. -no, no, no y no- se repetía en su interior Becky, porque tenía que mencionar ese asqueroso nombre, sintió sus ojos llenarse de lágrimas y sus manos temblorosas, quería irse de ese lugar, sentía que fue un error haber ido a ese lugar. Cuando estaba juntando los últimos planos sintió el calor de una mano sujetar la suya, levanto su vista encontrándose a esos ojos miel, un sollozó escapó de sus labios y las lágrimas salieron de sus ojos sin poder retenerlas.

Freen solo quiso consolarla y pensar en que ella estaba muy dañada a causa de algún infeliz , hizo que la rabia subiera a sus sistema, la atrajo a ella para abrazarla con el temor que ella la rechacé, pero para su sorpresa aquella pequeña mujer se derrumbó sobre su pecho y lloró, lloró como no lo había hecho en todo este tiempo ni siquiera con sus amigas.

Becky sintió paz en su corazón en el momento que ese perfume amaderado lleno sus cosas nasales, el calor de su cuerpo hizo que ella no sintiera más temor y se sintiera como en casa.

Me encanta que les este gustando esta historia, tanto como me encanto a mi 💕💕