Ámame como tu lo haces

Capitulo 37

Narra Becky:

Siento mi boca seca, mi cuerpo no quieren reaccionar a lo que deseo hacer, quiero abrirlos. Quiero saber si todo lo que escuche mientras dormía es cierto o solo fue producto de mi imaginación, yo lo escuché estoy segura que escuche su voz y sus caricias.

Hago una vez más el intento de abrir mis ojos y puedo notar la luz del sol que ingresa por la ventana, miro mis manos y noto como alguien me toma una de ellas.

-¿Muñeca?- su voz, si es real ella está aquí. Mis ojos se abren un poco más y vuelvo a cerrarlos y abrirlos lentamente acostumbrándome a la luz - ¡Qué alegría volver a ver esos ojos hermosos!- la escucho decir cuando ya mis ojos están fijos en ella, sus ojos miel con esas manchas verdes son lo que anhelaba tanto ver. Siento mis ojos inundarse en lágrimas, mi corazón late tan fuerte que lo escucho retumbar en mis oídos.

Freen seca mis lágrimas con sus dedos, sentir su piel sobre la mía me hace sentir segura, miro su muñeca y lleva la pulsera que le regale.

-¿Esto es real?- susurro sintiendo mi boca pastosa, la veo sonreír mientras sigue dándome pequeñas caricias.

-¡Si mi dulce amor, esto es real... Estoy aquí contigo!- rompo en llanto, lloro por todo el dolor que tengo acumulado, porque ahora estoy con ella que a pesar de todo está aquí conmigo, siento como mi pecho se contrae ante tanta angustia. Pero más me derrumbó cuando sus brazos me elevan de la cama y me acurruca en su regazo, sentada en ella y entre su brazos me permito llorar sintiéndome tan miserable, sucia y poco digna de que una mujer como ella se fije en alguien tan rota y sucia como yo. El aroma de su perfume penetra mis fosas nasales y me doy cuenta que la extrañaba más de que imaginé.

Sus manos acarician con delicadeza mi espalda y siento sus labios sobre mi frente.

-¡Llora mi amor, llora que siempre estaré contigo... Saca el dolor, pero luego debes levantarte y ser fuerte. - toma mi rostro entre sus manos para que nuestros ojos se conecten - Escucha bien lo que te diré - sus dedos quitan las lágrimas de mis ojos mientras me sigue mirando fijamente. - ¡Pasé lo que pase siempre estaré contigo... No importa que venga de aquí para adelante, escúchame bien Bec nunca te dejaré, porque te amo!- me ahogo en el llanto al escuchar esas últimas dos palabras. ¿Me ama porque? Sus ojos siguen clavados en mi y siento que ven hasta mi alma, el es luz en mi oscuridad.

-¿Me amas?- susurro y veo como una sonrisa se dibuja en sus labios.

-¡Si te amo, creo que lo hago desde el primer día que te vi!- de solo recordar el estado en el que estaba me avergüenzo y creo que el se da cuenta - No te atrevas a decir que estas horrible - me advierte.

- No diría tal cosa... Solo decirte que también te amo, que me enamore de ti creo que a segunda vista ya que la primera vez no te mire ya sabes porque - se ríe, su risa... Es música para mí, veo que sus ojos bajan a mis labios e inconscientemente paso suavemente mi lengua por ellos.

-¡ Quiero besarte!- acaricia mi labio inferior con su dedo índice, haciendo que una corriente recorra toda mi columna -Solo si tú quieres lo haré-

-¡Si... Bésame por favor!- deseo sentir sus labios, además quiero comprobar que con ella no tengo miedo, que podré estar a gusto con ella.

Toma mi rostro entre sus dos manos, sus labios apenas rozan los míos, está haciendo que desee cada vez más sus labios. Cierro mis ojos a la espera de su contacto. Su aliento tibio choca contra mi rostro y siento la calidez de sus labios sobre los míos, haciéndome sentir una vibración sobre todo mi cuerpo que parecen como electro shock que le dan a mi alma para que vuelva a vivir. Nuestros labios se mueven con delicadeza, se que lo está haciendo así por temor a dañar más mis labios estropeados. Se separa un poco de mi y afirma su frente sobre la mía, siento su mirada aunque no la esté viendo no quiero abrir los ojos y que esto sea un sueño.