Exactamente 2 semanas habían pasado... 2 semanas en las que no hablaba con YoonGi. Aún recuerda aquella pelea entre HyungSoo y el pálido, él no pudo hacer nada para evitarlo, pero es que después de aquella llamada, YoonGi pareció haber perdido el control.
Lo poco que escuchó era a una mujer llorando, pero nada más.
YoonGi intentó hacer sus maletas, se encontraba en una especie de shock, no quiso escucharle... y cuando HyungSoo regresó de la empresa, todo fue peor, pues le prohibió rotundamente salir de la casa. A su parecer HyungSoo lo hacía porque estaba preocupado, pero el pálido no lo veía así.
— ¡¿Que no entiendes con un demonio?!... tengo que ir con ella.
Recuerda que había dicho, también sobre la muerte de alguien, un tal Tomas.
— Sales por esa puerta y nuestro trató se termina Min YoonGi.
Le contestó su padre con un rostro demasiado serio.
— No puedes hacer eso...
— ¡Deja de comportarte como un maldito niño!... claro que puedo hacerlo, no sabes ni siquiera lo que le ocurrió, puede ser peligroso hijo.
— ¡No me llames hijo!... — juntó sus cejas cuando algo se vino a su cabeza — él, él estuvo conmigo, él lo publicó.
— ¡¿Que idioteces estás diciéndo?!.
Pero YoonGi se le fue encima apretando las manos alrededor de su cuello, sus ojos estaban inyectados de rojo, le miraban con odio. JiMin solo pudo gritar y rodear al pálido por la espalda, intentando quitarselo de encima al mayor.
Ambos se miraban y YoonGi apretaba sus dientes y respiraba por su boca — HyungSoo...
— YoonGi, suéltalo — le rogó el rubio, pero parecía que este no le escuchaba — YoonGi por favor — volvió a decir asustado, con la voz quebrada — suéltalo — sollozó apretando sus manos alrededor del pálido.
YoonGi le escuchó y se odió por flaquear cuando sintió los latidos apresurados de JiMin. Pero en este momento solo quería golpear a su padre.
Con todo el escándalo, NamJoon llegó a la habitación de su hermano, sorprendiendose con lo que veía y rápidamente se acercó.
— NamJoon, llévate a HyungSoo por favor.
El moreno obedeció.
— Tienes prohibido abandonar mi casa antes de terminar tu trabajo... no te atrevas a desobedecerme — le señaló.
— Vamos señor...
NamJoon logró sacarlo.
JiMin seguía rodeando el cuerpo de YoonGi y entonces presionó su rostro en la espalda de este intentando calmarse — Y-Yoon-...
— Vete y déjame solo... — le pidió, con una voz tan fría — Suéltame.
— No voy a irme... mírate como estás, quiero quedarme aquí, contigo — soltó preocupado.
Pero YoonGi se apartó de su toque, porque no tenía cabeza para nada más — Quiero estar solo... ve con él, vete ya.
Desde aquel día, no le había visto, ni siquiera sabía si salía de la habitación, si escapó... No estaba entendiendo nada y por más que le preguntó a su pareja este no quiso llevar el tema a colación.
Abrió la puerta de la casa y dejo los zapatos en la entrada y su bolso en el perchero, HyungSoo aún no regresaba a la casa, lo sabia porque este le había llamado hace unos minutos atrás. Caminó por la estancia y se sorprendió cuando giró hacia la puerta corrediza que daba al jardín.
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En Los Brazos Equivocados / Yoonmin
RomanceJiMin quiere salir de su pobreza de la manera equivocada y más fácil que se le pudo ocurrir... y es seducir a su profesor el cual cabe recalcar que es mucho mayor que él, y más poderoso de lo que imagina. Pero a JiMin eso no le importa, no cuando el...