[GC] Amarillo

Daffodil: Capítulo 12

Entre todos los preparativos que requería ese viaje, el tiempo pasó rápidamente para dar lugar al inicio de una nueva aventura.

Sean anotó cada uno de los consejos que le dio la enfermera, y los procesos que debía seguir en caso de sentir alguna molestia, comprometiéndose a hacerle caso en todo para poder unirse a la misión con su equipo.

Agatha no estaba muy convencida de dejarlo marchar, pero tras sus meticulosas instrucciones y asegurarse personalmente de que llevaban un kit de primeros auxilios le deseó suerte y que ojalá no volvieran a verse en mucho tiempo.

El arconte solo se rio y prometió tener más cuidado.

Caminar nuevamente por esos senderos tan conocidos y sentir el viento revolverle el cabello trajo consigo una sensación de alegría. La guardia no parecía diferente en lo absoluto, la gente continuaba su rutina, caminando de un lugar a otro, saludando en ocasiones y deteniéndose a conversar por momentos.

Sean acababa de conseguir que le dieran el alta para salir de la enfermería, por lo que se detuvo a conversar casi en cada esquina, durante su camino siempre se le acercaba alguien para preguntar sobre su salud.

Aquellos contratiempos le hicieron llegar un poco tarde a la reunión con sus compañeros. Habían acordado reunirse en la entrada antes de partir todos juntos.

—¡Al fin estamos todos! —dijo Mya tan pronto lo vio llegar —. ¿Tuviste algún problema?, la enfermera da un poco de miedo...

—Digamos que tuve muchas preguntas que responder... pero ya todo está listo.

Con todos sus ánimos por las nubes, Mya presentó rápidamente a los dos nuevos compañeros que eran parte del equipo, y que Sean solo conocía por sus nombres. Tal'ric agitó la mano suavemente, saludándolo. La pequeña sonrisa incómoda y su mirada que intentaba encontrar algo interesante que observar en cualquier parte hacía notar lo tímido que era, y lo nervioso que se sentía. Por otro lado, Ramsey parecía casi tan contento como Mya, saludando con entusiasmo.

Conocerlos trajo recuerdos de sus primeros días en la Guardia Cristal, de la primera vez que vio y conversó con Mya y Usagi. Desde ese momento, siempre ocurría algo extraño en su día a día, o quizá eran solo situaciones a las que no estaba acostumbrado.

Todo en ese instante era normal, pero tal y como estaba destinado a ocurrir, su amiga pelirrosa estaba allí para llamar la atención con sus mejores ocurrencias.

Sus orejas de conejo y la totalidad de su cabello se escondían debajo de un pañuelo blanco combinado con una capucha verde, pequeños adornos de perlas y figuras de madera colgaban de ciertas partes de la tela. Por último, sobre sus ojos había colocado unas gafas de sol en forma de estrellas, de un tono rosa tan brillante que reflejaba los alrededores como un espejo, e impedía notar cualquier expresión que hiciera.

Podría jurar que esas gafas le pertenecían a Kaori...

—Ya que estamos haciendo presentaciones, quiero decirles que es un placer conocerlos muchachos, mi nombre será Zaida durante esta misión en cubierto —les dijo Usagi con seriedad.

—¿En cubierto...? —preguntó Mya con evidente confusión, a la vez que sacaba una libreta de su bolsillo para releer los detalles de la misión.

—¡Sí!, iré en cubierto para garantizar el éxito de la misión.

—Te ves un poco... —comenzó diciendo Ramsey, y se detuvo solo para contener la risa—. No sé muy bien qué decirte, pareces una devota onírica con mucho estilo. ¡Amén hermana!