Ella era una semidiosa, la semidiosa más fuerte que pudo aver conocido, alguien que apesar de tener todo en contra siempre lograba encontrar una manera para salirse con la suya
Aunque claro, en el buen sentido.
Zaira era especial, tenía aquella chi...
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Eran las 5, casi las 6 de la mañana, y la mayoría de los campistas aún dormían profundamente. Sin embargo, aquellos que participarían en la misión de rescate ya estaban en movimiento, haciendo los últimos preparativos, y ella no era la excepción. Revisaba una y otra vez su mochila, asegurándose de no olvidar nada.
Llevaba consigo lo esencial: ambrosía de emergencia, un par de cambios de ropa, dinero, dracmas, algo de comida, un par de armas blancas. Todo lo necesario para una misión.
Unos golpes suaves resonaron en su puerta. Sonrió, convencida de que era Percy.
Su hermano se había levantado mucho mas temprano que ella y había salido, no fue a buscarlo pues supuso que necesitaba su espacio.
—Oye ¿Dónde fuiste?—pregunto mientras abría la puerta.
Frente suyo no se encontraba Percy, sino Thalia y Grover, ambos cargaban con sus mochilas.
—Es hora de irnos, Zoe esta insoportable —agrego Thalia sin mirarla directamente a los ojos.
—¿Ya debemos irnos? pero aun no me despedí de Percy, el aun no vuelve
—No podemos esperar mas, yo también quiero despedirme de el, pero ya es hora —Dijo Grover.
Ella suspiro y tomo su mochila, no sin antes escribir una pequeña nota donde se despedía.
Cuando salió cerro la puerta de su cabaña detrás de ella. Los tres comenzaron a caminar hacia la salida del campamento, pero a medio camino alguien la detuvo.
—¿Nico? —miro al niño por un momento antes de voltear a ver a Thalia y a Grover a los cuales les hizo una señal para que se adelantaran. Ambos se miraron entre si para luego irse.
—Con que ya se van...
—Si, debo ir a buscar a Annabeth y a Artemisa
—¿Vas a volver verdad? aun no jugamos esa partida de mitomagia que prometiste
—Claro que voy a volver
—¿lo prometes?
—Mira, te daré algo —tomo su mochila y rebusco algo dentro de ella. Cuando por fin lo encontró tomo su mano y coloco el objeto sobre ella.
Nico lo observo con atención.
Era un collar que tenia una pequeña caracola. Aquel fue uno de los primeros regalos que Sally le había dado
—Esta caracola es importante para mi así que volveré para que me la devuelvas
—¿me lo dejaras?
—Si, confió que la cuidaras —Nico sonrió levemente, cuando lo vio no pudo evitar recordar a Percy.
Solía hacer eso con el cada verano cuando tenia que volver a el campamento, Percy siempre había tenido miedo de no volverla a ver asique aquella era una forma de asegurarle que lo haría. siempre le había parecido tierna la manera en la que esperaba que se lo diera cada que se acercaba a la puerta para irse.
