Historia de un amor agridulce (Hades x Maléfica)

Karma

IMPORTANTE:  Este capítulo contiene menciones de muerte y no hay romance en él. / Ubicado post Descendientes 4 en la línea temporal original

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Algo sucedía en Auradon, algo muy, muy malo. Las personas que aún habitaban la Isla o tenían negocios ahí lo notaron cuando los cielos se oscurecieron y por el puente comenzó a marchar un ejército vestido de rojo.

Pronto las radios y los televisores encendidos empezaron a dar las malas noticias: el Museo de la Magia había sido robado. Todo artículo que alguna vez fue motivo de pesadillas para las regiones que conformaban los Estados Unidos de Auradon había sido destruido con excepción del más legendario de ellos: el cetro de Maléfica.

Poco después la segunda noticia llegó. La Reina Ella había sido asesinada y su cabeza había sido colgada a las entradas de Auradon central como señal de lo que estaba por venir.

Al final y gracias a un par de afortunados que lograron escapar de la escena se supo la última noticia. La Reina de Corazones de Wonderland había tomado Auradon y se había proclamado como gobernante de todo el estado.

Los habitantes de la isla apenas habían tenido la posibilidad de escuchar la noticia cuando las tropas de la Reina ya estaban invadiendo sus calles y destrozando sus casas.

Los primeros en intentar combatir el fuego fueron los piratas, que valientemente salieron a defender su territorio. Sin embargo cuando las espadas cayeron, dos garfios dorados fueron reclamados como trofeos.

Las tropas se expandieron al igual que el fuego y la destrucción. Los ciudadanos que pretendían defenderse eran inmediatamente neutralizados por las armas mitad lanza-mitad hacha del ejército.

En su toma por toda la isla, un grupo de soldados se adentró por territorios específicos buscando objetivos cuya sentencia ya estaba dictada. Los antiguos villanos, ahora entrados en su quinta década, fueron aniquilados uno tras otro sin aviso ni piedad y luego el grupo encargado se juntó para enfrentar a su último objetivo en el territorio.

Hades supo que las cosas estaban mal cuando escuchó los pasos de por lo menos siete personas marchando por el túnel que dirigía a su infratierra y Maléfica pareció darse cuenta de ello también.

En cuanto entraron el antiguo Rey del Inframundo no recibió explicaciones y tampoco tuvo que pedirlas. Reconoció el uniforme lleno de corazones como parte de la monarquía más cruel que existía aún en esos años.

-Lárguense- exigió encendiendo su cabello.

Pero ellos no retrocedieron. No podían, pues la Reina de Corazones los asesinaría si dudaban un poco de sus acciones. No harían tampoco, pues era bien sabido que del antiguo y poderoso dios no quedaba más que el nombre, pues nunca pudo reconciliarse con los Olímpicos y recuperar su Reino o la totalidad de sus poderes.

Dos soldados lo atraparon y lo arrodillaron. Él forcejeó, pero una segunda pareja llegó a pararse sobre su espalda para evitar que se moviera.

Su cabeza fue levantada por uno de los soldados sólo para observar lo que sucedería. A unos metros Maléfica había sido sacada de su pecera y puesta en el piso, con la cola pisada para evitar que escapara.

-¡No se atrevan!- pidió, con el corazón ardiendo de furia

Pero en un parpadeo, el lagarto en el que se había transformado su ex-esposa fue aplastado por las gruesas y pesadas botas de su verdugo.

Hades explotó de coraje e impotencia. Su fuego se había vuelto rojo y por cuestión de dos segundos pareció levantar el peso de todos los que lo habían sometido, sin embargo, ellos recuperaron el poder.

Frente a su mirada apareció un cupcake rojo y las botas de un soldado que simplemente dijo:

-La Nueva Reina de Auradon le manda sus saludos.

El soldado preparó su hacha y Hades hizo un intento desesperado por librarse del karma.

En su mente pasó fugazmente su historia como dios, su historia con Maléfica y sobre todo lo más preciado que tenía: Mal.

Sabiendo que al volver de su viaje ella sería la siguiente, Hades lloró de tristeza como nunca lo había hecho en su vida.

Y todo quedó en negro. 

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Hey!

Lamento que hoy fuera una historia triste, pero vi un post en facebook justo sobre el golpe de estado de Bridget y dije "wey, yo debo escribir algo sobre ello" y pues aquí está :v

Lloraron? Me odian? 

Nos leemos luego <3