Prólogo.

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Ángeles Rasmüssen no esperaba acabar en Hogwarts. Había nacido en Buenos Aires, Argentina, y su vida estaba marcada por un poder inestable que apenas lograba controlar. Criada en las selvas de Brasil bajo la tutela de Castelobruxo, la escuela de magia de América del Sur, su mundo era muy distinto al que ahora la rodeaba. Hogwarts, con su frío clima, sus castillos de piedra y su historia tan distante, no se parecía en nada a la vida que conocía...

Su madre, Amelia Crouch, una periodista reconocida en el mundo mágico, al explicarle sobre Hogwarts, le había advertido una y otra vez sobre los peligros de Slytherin. "Evita a los Malfoy, nada bueno puede salir de esa casa, Angie."... Qué irónico resultaba ahora, haberse encontrado en esa misma casa, la de las serpientes.
Ángeles se sentía fuera de lugar, no solo por su origen, sino porque siempre había sabido que su magia, esa fuerza caótica que fluía por sus venas, podía convertirse en una amenaza si las personas equivocadas la encontraban. Ella no estaba en Hogwarts por elección; estaba allí por seguridad.

Mientras caminaba por los pasillos de su nueva escuela, el contraste entre su vida anterior y la que ahora comenzaba en Hogwarts era evidente. No conocía a nadie, y muchos parecían mirarla con una mezcla de curiosidad y desconfianza. Después de todo, no era común que alguien viniera de tan lejos, y mucho menos con la reputación que Ángeles parecía cargar, incluso sin quererlo. Pero la realidad era otra: su presencia en Hogwarts no solo se debía a su propio peligro, sino a lo que podía suceder si alguien intentaba usar su magia inestable para fines oscuros.

Y luego estaba él, Draco Malfoy. Desde el primer día, su encuentro con él no fue exactamente cordial. Quizás fuera la diferencia cultural, o tal vez solo su carácter altivo, pero algo en Draco parecía empeñado en hacerle la vida más difícil. Aunque su madre le había advertido sobre los Malfoy, Ángeles comenzaba a preguntarse si todas esas advertencias eran verdaderamente necesarias. Un mal comienzo no siempre significa un mal final, ¿no?

Hogwarts era un lugar lleno de secretos, y los suyos eran más grandes de lo que cualquiera podía imaginar.

Quizá había un millón de razones para mantenerse alejada de Draco Malfoy, pero Ángeles también comenzaba a entender que había otro millón de razones para quedarse. Después de todo, a veces las personas no son lo que parecen a primera vista, y el mayor desafío es descubrir quién realmente merece una oportunidad.

Entre el amor, la traición y el sufrimiento, Ángeles aprenderá que, a veces, la redención puede encontrarse en los lugares más inesperados... incluso en el corazón de alguien como Draco Malfoy.

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1: Si bien nací en Buenos Aires, NO voy a usar castellano argentino, si no, castellano neutro. No quisiera que se pierdan detalles de la historia por una palabra que no entiendan.
2: Aunque no hay nada explícito que la convierta en una historia +18, hay temas y escenas que no serian aptos para todas las edades. Leer bajo su propio riesgo y mantengan discreción.

𝐔𝐧 𝐦𝐢𝐥𝐥ó𝐧 𝐝𝐞 𝐫𝐚𝐳𝐨𝐧𝐞𝐬 [Draco×OC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora