Lucha conmigo

Capítulo 30

Al día siguiente recibí un mensaje de Lucas preguntándome si quería ir con él al cine.
No me encontraba de buenos ánimos, pero decidí que me vendría bien despejarme la cabeza.

-Pues resulta que se liaron los dos en el campamento -le decía a Lucas mientras llegábamos al cine.

-¿¿En serio?? -dijo con cara de asombro.

-Muy enserio.

Estaba apunto de contarle a Lucas lo del "falso Rubén" y todos sus mensajes acosadores. Sin embargo, creía que no era ocasión. Tal vez más adelante.

-Joder, después de habértelo pedido hace...¡horas! -negó con la cabeza.

-Lo sé -hice una pausa-. Quedé con él ayer y...

-¿Qué pasó?¿Te dijo algo más absurdo? -interrumpió con ansia.

Intenté buscar las palabras correctas para responder, pero lo mejor era seguir contando la historia y no anticiparme.

-Estuvimos hablando y me confirmó que era él el del video. Pero eso no es lo peor.

-¿Te hizo algo? Porque juro que iré y le...

-¡No! Tu déjame terminar, ¿vale? -asintió, finalmente- Me dijo que se dejó llevar y que estaba confundido. Luego me dijo que lo mejor era que rompiéramos -Lucas abrió la boca para hablar pero le corté-. Yo, sin creérmelo, le empezé a preguntar el por qué de ese cambio tan repentino.

-¿Y te dijo algo?

-Sí. Que Lara...estaba embarazada -la garganta se me secó al pronunciar aquello.

Los ojos se le abrieron aún más al escucharme.

-¿Qué dices? Eso es imposible.

-Es lo que me dijo. Además de que por eso pensaba que debíamos terminar y que tenía que estar junto a ella en estos momentos tan difíciles -puse cara inexpresiva. No sé si sentía asco, incredulidad o vergüenza.

-Debe de habérselo inventado, seguro. Porque de ese modo lo tendría atrapado en sus redes y así sabría que no la iba a dejar.

-Lo más probable, la verdad -le di la razón-. No solo se liaron, sino que se acostaron -dije, pensando en cuánto me traicionó Rubén.

Lucas rodeó mi cintura con su brazo, acogiéndome en un lugar seguro.

-No pienses más en ellos. No te merecen -se inclinó y me dio un beso en la cabeza.

Una descarga eléctrica recorrió mi cuerpo enteró.

Enseguida llegamos al cine y entramos a la sala para ver la película acurrucados.

**

Lucas y yo ya habíamos salido del cine.
Por el camino de vuelta no parábamos de hablar sobre lo alucinante que eran los efectos especiales.

-Mierda -dijo, rebuscando en el bolsillo de su pantalón.

-¿Qué pasa? -pregunté.

-Me he dejado el móvil en el cine. Soy súper despistado algunas veces, perdóname. ¿Te importa si voy y vuelvo enseguida? Tardo 5 minutos.

-Vale, está bien -dije.

Antes de irse corriendo en la dirección contraria, se acercó y me dio un rápido beso en los labios.

Wow.

Con una sonrisa alegre y con las mejillas algo coloradas se apartó y se dirigió al cine.

Sin saber qué hacer, me dediqué a observar mi alrededor mirando cada cosa.

A mi derecha había un un bloque de edificios grandes pero había un callejón oscuro que lo separaba en dos mitades.