XXXIX

727 86 11
                                    

-Watching in slow motion as you turn around and say take my breath awaaaaaaaaaaaaaaaaay

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


-Watching in slow motion as you turn around and say take my breath awaaaaaaaaaaaaaaaaay

-Divina, mi amor, ¿podrías dejar de cantar?

-¡Es un clásico, princesa!

-Me estás rompiendo el oído.

-Grosera.

Yoko le sonrió a Divina, rodando los ojos, para luego darle un pequeño beso que la iba a tener contenta por el resto del día y, de seguro, haría que no siguiera cantando.

-¡TAKEEEE MY BREATH AWAAAAY!

O tal vez no.

En ese momento, Ajax llegó corriendo donde ellas, sonriendo, mientras un tieso Xavier le seguía haciendo una mueca con cada paso.

-¡Xavier, apúrate! -le gritó Ajax de forma malvada.

Thorpe murmuró algo inentendible en voz baja en tanto Divina y Yoko comenzaban a reírse al notar el por qué su amigo estaba caminando así.

Minutos después, Wednesday y Eugene aparecieron con expresiones de sueño, pero el chico de dientes de ardilla pareció perder todo cansancio cuando se acercó a hablar con Ajax y Xavier. Por otro lado, Wednesday bostezó y se apoyó en Divina.

-¿Ya vamos? -preguntó mirando hacia la entrada del parque de diversiones.

-Sí, sólo hay que esperar a Enid -comentó Yoko.

Wednesday asintió, tratando de no lucir un poco afectada por la mención de su exnovia. Después de todo, las cosas entre ellas estaban supuestamente bien, así que no tenía motivos para reaccionar así.

-¿Seguimos teniendo prohibido decirle a Enid de que te vas? -preguntó de pronto Ajax, llamando la atención de todos.

Wednesday apretó sus labios en una fina línea por un momento.

-Sí-respondió desviando la vista-. Yo me encargaré de decírselo.

Xavier bufó.

-No me gusta mentirle a mi mejor ami-

-¡Chicos!

Afortunadamente, Xavier dejó de hablar cuando Enid apareció con una sonrisa pequeña.

Y detrás de ella venía otra chica.

Todas miraron a Wednesday, que seguía con el rostro impasible aunque por dentro algo dolía.

-Lamento la tardanza -dijo sonriendo en modo de disculpa-. Les presento a Olivia... una amiga.

La recién llegada miró a todo el mundo con timidez, saludando en voz baja. Las chicas le devolvieron el saludo respetuosamente, tratando de no fijarse demasiado en el aspecto de Wednesday, que se veía más indiferente y ajena al resto que nunca.

-Pueden decirme Livie-dijo Olivia tomando el brazo de Enid.

-Vamos-Enid le tomó la mano, arrastrándola hacia las boleterías, -podemos subirnos al juego que quieras.

-¿De verdad, Nini? -preguntó Olivia.

Wednesday apretó su mandíbula, sin poder dejar de observar las manos de Enid y Olivia. Mientras el resto se adelantaba, agarró a Xavier del cuello de la camisa y tiró de él.

-¡Ay, Wednesday, cuidado que me duele el culo! -se quejó el rubio frunciendo el ceño.

-¿Enid nunca te mencionó a esta chica? -le preguntó con la voz helada.

Xavier la miró con un poco de mofa.

-¿Celosa? -se burló.

-Ya quisieras.

La sonrisa desapareció del rostro de Xavier, fijando sus ojos en Enid y Olivia, que estaban comprando algodones de azúcar. Enid le estaba diciendo algo a Olivia, que se reía en voz baja, con las mejillas un poco coloradas.

-No, no la había mencionado antes. Digo... no he hablado mucho con Nini estas dos semanas, estaba muy ocupada por algo que no me quiso decir -Xavier miró a Wednesday con simpatía-. No te preocupes, Wednesday, no creo que ellas dos tengan mucho futuro.

-No me importa-mintió Wednesday cruzándose de brazos-. Enid puede hacer lo que quiera con su vida.

Siempre y cuando yo esté en ella, pensó ahogando los celos en su interior.

-¿Podemos subirnos a ese juego, Nini? preguntó de pronto Olivia, apuntando a la montaña rusa recién estrenada.

Todas pudieron ver como Enid palidecía y empezaba a balbucear cosas.

-¿No prefieres ese, Livie? -dijo Enid apuntando a un juego de patitos.

Olivia frunció el ceño, confundida.

-Pero ese es aburrido... -dijo sin mala intención,- pero si tú quieres, entonces...

-¡Está bien! -chilló la pelirosa de pronto, pellizcándole la mejilla a Olivia-. Vamos a la montaña rusa.

El rostro de Olivia se iluminó y la abrazó, riendo.

-¡Gracias, gracias, Nini!

Wednesday quería matar a esa mocosa que estaba abrazando a su chica.

Fueron a hacer la fila para la montaña rusa y toda la atención de Enid estaba sobre Olivia, que parecía estar hablándole sobre sus clases o algo que definitivamente no le importaba a Wednesday, quien sólo miraba a Enid queriendo llamar su atención, que fijara sus ojos en ella y en nadie más.

Por supuesto, lo logró pero no de la forma que deseaba.

Porque luego de subir a la montaña rusa y bajarse, Enid salió llorando debido al miedo enorme que sintió por la velocidad y los bruscos movimientos del juego. Olivia parecía totalmente mortificada por ello, tratando de sostenerla y consolarla, pero Wednesday no lo soportó más y se acercó a ellas con furia mal contenida.

-¡¿Cómo se te ocurre hacer que se suba a ese juego?! -le gritó sin poder controlarse, asustando a Olivia-. ¡Nini le tiene miedo a casi todo!

Bueno, quizás no debía decir eso, pero no podía evitarlo.

-Yo... yo...

-¡¿Qué clase de cita quieres tener con Enid?! -siguió gritando Wednesday atrayendo a la pelirosa contra sí, dándole un abrazo. ¡Eres como la peor novia del mundo, idiota!

Olivia la miró, confundida, con expresión sorprendida, y Enid se alejó de Wednesday, parpadeando con sorpresa.

-¿Novia? -Enid miró a Olivia-. Livie no es mi novia ni mi cita...

¿Qué?

-¿Qué? -preguntó Wednesday mirándola, atónita.

Enid se removió, incómoda.

-Livie es... es mi media hermana -dijo con voz tímida.- Mamá quería que la conociera.

Oh.

Bueno, eso era incómodo.

Novia de AlquilerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora