Wednesday Addams odia las cosas del amor, y sobre todo, las novias. Su madre desea que tenga una pareja para que así sea feliz y deje de ser tan amargada, así que decide "alquilar" a una chica con una preciosa sonrisa, Enid Sinclair, para que sea la...
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-Uff, ricura, quién fuera perla para estar dentro de tu concha.
Wednesday escupió la bebida que estaba tomando sobre Ajax, que soltó un chillido de horror y asco. Entornando los ojos para fulminar con la mirada a quien fuera que le dijo esas palabras.
Se encontró con el rostro sonriente de Tyler, y a su lado estaba...
-¡Bianca! -saludó Ajax como si nada, haciéndose a un lado en la mesa para dejarle espacio a los recién llegados -. Mira, esta es la amiga de la que te hablaba, se llama Wednesday. Es un poco gruñona pero buena persona.
Wednesday fulminó con la mirada a Ajax, que le observaba con una sonrisa inocente aunque podía leer la maldad en sus ojos. Ese chico era el hijo perdido de Satanás, ya lo tenía claro desde hace mucho tiempo.
Ajax abrazó el brazo de Tyler pestañeando con seducción en tanto la recién llegada contemplaba a Wednesday con admiración.
-Quisiera ser pirata, para encontrar el tesoro que tienes entre pata y pata -dijo Bianca sin dejar de sonreír.
Por el amor a todo lo sagrado...
-Voy a matarte, Ajac -le gruñó al chico de cabello rosado.
Ajax, que en ese momento estaba comiendo una patata frita que Tyler le dio, la miró con desconcierto.
-Yo sólo quiero animarte -Ajax frunció los labios-. Desde que hablaste con el director para aceptar la beca que estás más gruñona y triste que nunca.
Wednesday desvió la vista, pensando en la última conversación que mantuvo con el jefe de su carrera sobre los papeles que iba a necesitar para comenzar con el traslado. Era una oportunidad única en la vida, como había dicho su profesor, e incluso su mamá comenzó a llorar cuando le contó sobre ello.
Pero a pesar de todo eso, no podía evitar pensar en el rostro sonriente de Enid.
No había hablado con ella desde que huyó de su casa, dos semanas atrás.
-No estoy triste -mintió comenzando a comer de sus papitas-. Y definitivamente no necesitaba que me consiguieras una cita -miró a Bianca, que en ese momento parecía demasiado concentrada en descifrar el inglés de los anuncios de comida.- ¿Acaso tú no arreglaste tu relación con Xavier?
Ajax se encogió de hombros, sonriendo otra vez con maldad.
-Ya puse mis condiciones-humedeció su labio, riéndose, -pero Xavier quedó en shook y me pidió un poco de tiempo para prepararse. Además... no he hablado mucho con él esta semana, creo que está un poco ocupada -se encogió de hombros.-Pero si lo pillo con ese chico...
-Ajax celos locos no lo dejará caminar en un mes -bufó Wednesday.
-Haré que me diga daddy por el resto de su miserable vida -respondió soñadoramente el menor.
Wednesday soltó una risa baja, negando con la cabeza y sin poder creer que ese muchacho que se veía tan dulce y tierno fuera un diablo por dentro.
Ajax iba a decir algo más, pero luego se quedó callado.
-¿Qué pasa? -preguntó Addams.
-Mira, te voy a decir algo pero no te gires... ¡WEDNESDAY, NO TE GIRES, POR LA PUTA!
¿Qué se supone que iba a hacer si le decían que no se girara? ¿No girarse? Sí, claro, como si esas cosas funcionaran un poco.
Se encontró con los orbes zafiro de Enid, posados sobre ella.
Detrás, Xavier llevaba una bandeja de comida.
Si la situación no podía ser más incómoda, la amiga de Tyler pasó un brazo por los hombros de Wednesday, atrayéndola contra ella.
Los ojos de Enid se estrecharon y comenzó a caminar hacia ella.
Wednesday la miró de forma grosera, recostándose contra Bianca, pensando con rabia que Enid no podía reclamarle algo porque ellas habían terminado, ya no estaban juntas, y las cosas habían terminado mal así que no había otra oportunidad entre ambas.
-Quiero hablar contigo, Wednesday -dijo Enid frente a ellas.
Wednesday la miró, fingiendo estar leyendo un anuncio de la pared con interés.
Ajax se removió en su asiento, incómodo.
-Oh, vaya, yo creí que habías cortado toda relación con Tyler, Jay -dijo Xavier con una sonrisa psicópata al lado de Enid.
-No has respondido a mi condición-replicó Petropolus sin amedrentarse.
Hubo un pequeño silencio.
-Esta noche iré a tu casa -dijo Xavier haciendo el gesto que solía hacer cuando se encontraba celoso: presionó su lengua contra una de sus mejillas con ojos disgustados.
-Lleva mucho lubricante, mi amor, porque no voy a follarte el culo sólo con mis dedos -contestó Ajax sonriendo de lado.
Xavier se giró, murmurando groserías en voz baja, y se alejó para sentarse en una mesa un poco lejana.
-Wednesday -insistió Enid.
-¿Sigues aquí? -gruñó Wednesday sin mirarla todavía.
-Por favor.
-No hay nada de qué hablar.
Otro silencio entre ellas.
-Gatito... por favor...
Su tono de voz destrozado fue suficiente para hacerla bufar de forma casi imperceptible, poniéndose de pie.
-Vamos a algún lugar más privado -fue todo lo que dijo Addams.
Enid la siguió sin dudar un poco.
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