Wednesday Addams odia las cosas del amor, y sobre todo, las novias. Su madre desea que tenga una pareja para que así sea feliz y deje de ser tan amargada, así que decide "alquilar" a una chica con una preciosa sonrisa, Enid Sinclair, para que sea la...
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Wednesday tuvo que pedirle perdón a Olivia por haber reaccionado tan violentamente, pero al parecer la menor no quería acercarse demasiado a ella porque se escondió detrás de Enid todo el tiempo que duró la salida.
Wednesday no podía echarle la culpa, ella misma sabía que a veces daba miedo cuando se enojaba.
Enid hizo como que nada había pasado, sin embargo, era bastante obvio que estaba un poco incómoda por la situación.
Cuando llegaron a la última atracción, la rueda de la fortuna, Yoko miró a sus amigas con una ceja enarcada.
-Yo iré con mi Pimpollo -comentó Yoko tomándole la mano a su novia.
-Yo iré con Xavy -Ajax abrazó el cuello de Xavier, sonriendo.
-Bueno, yo iré con Wedn… ¡AH! -Ajax le pisó el pie a Eugene, fulminándolo con la mirada. -Con Olivia, quise decir- le sonrió el moreno-. Ya saben, es necesario conocernos mejor y todo eso. Oye, Livie, ¿sabías que los hámsters planean la dominación mundial?
Enid asintió, sin mirar a nadie, sabiendo que le tocaba con Wednesday, quien tampoco dijo algo para negarse.
Así que cuando fue su turno de subir, lo hicieron sin discutir.
Afortunadamente, esta rueda de la fortuna era con asientos cerrados, por lo que Enid no estaba tan asustada cuando entró. Ambas se sentaron una al lado de la otra, esperando que el juego iniciara, sin decir cosa alguna.
-Lamento como reaccioné antes -murmuró Addams de pronto, sin mirarla.
-Está bien-la voz de la menor era suave, -Yo tampoco aclaré quién era Livie-se encogió de hombros-. Es sólo que... no quería que hicieran muchas preguntas.
Wednesday mordió su labio inferior, volteándose a mirarla. Enid estaba observando el cielo con una sonrisa tierna.
-Entonces... ¿Olivia? -preguntó sin querer presionarla-. No se ve mucho menor que tú.
Enid la miró, y Wednesday quedó prendada de sus ojos, sin poder alejar la vista. Había olvidado lo preciosa que era Enid, y ahora sentía ganas de tenerla en sus brazos y nunca soltarla.
-Han sido... unas semanas un poco agitadas. He conversado mucho con mamá, me contó... Me dijo varias cosas -soltó una risa nerviosa, y Wednesday, de forma impulsiva, le tomó la mano-. Su esposo se llama Mark, era un antiguo compañero de la secundaria de quien estuvo siempre enamorada. Olivia es su hija.
-Pero aun así...
-Supongo que no puedo recordarlo, pero mamá me dijo que nunca perdió el contacto con Mark, y en uno de sus encuentros... Bueno, quedó embarazada de livie. Yo tenía tres años, así que no tengo memoria de eso -Enid suspiró, dándole un suave apretón-. Mamá me dijo que conoció a su esposo luego de separarse de papá, pero no fue así, sólo lo dijo para no ponerme más triste de lo que ya estaba. La realidad es que... mamá y papá nunca se quisieron, y Sophie y yo fuimos sólo una tortura para ellos.