Buscando Pistas

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Freddy estuvo preocupado todo el día; no creía lo que Gustabo le contó. No quería presionarlo, pero eso no le quitaba el mal presentimiento de encima. La visita de Luisito la noche que Gus se fue y luego la de Kylie; solo le confirmó que tenía que ser algo más que lo que le habían contado. Repasó en su cabeza una y otra vez todo lo sucedido, pero no encontraba nada raro o fuera de lugar para que Gustabo se pusiera en ese estado de la nada.

No se concentraba en el trabajo, no dejaba de pensar y eso lo desconcentraba. Rogelio y los chicos tuvieron que apañárselas para adivinar los planes de Freddy y Toni sobre como continuarían con su negocio. Cuando el rubio le llamó, su humor cambió y pasó a querer hacer todo rápidamente para volver a casa junto a el; por la parte que les tocaba los chicos se alegraron, ya que el trabajo de un par de horas se había demorado a más de la mitad del día por la distracción del moreno.

Freddy salió temprano como pensó, fue al restaurante favorito de Gustabo y compró todo lo que más le gustaba. Era una tontería si, pero esperaba que eso terminara por subirle el ánimo y , quizás, contarle la verdad de todo lo que había pasado. Llegó a casa y llamó al rubio, pero no le contestó; subió al piso de arriba y tampoco estaba; intentó llamarlo pero el teléfono estaba apagado. Volvió al piso de abajo y encontró una nota de Gustabo.

"Tuve que salir, problemas con el trabajo. Te llamo en cuanto pueda. No te preocupes demasiado, te quiero. Gus"

Freddy sonrió al ver las palabras con las que el rubio se despidió de él; Gustabo no era muy dado a decir esas cosas pero en un mismo día se lo había dicho dos veces y eso le gustaba. Miró la gran cantidad de cena que había traído para el , iba a tener que tirar más de la mitad. Entonces pensó, cogió su teléfono y llamó a Luis y Bo para que lo acompañaran; era un desperdicio tirar tanta comida y tampoco le apetecía estar solo. En realidad, solo quería ver a Luis por lo ocurrido la noche anterior, pero Bo no quería despegarse de él y sería raro que el moreno no quisiera recibirlo por lo que aceptó muy a su pesar. Tenía una hora antes de que llegaran, por lo que puso algo de música y fue a darse una ducha para quitarse el mal cuerpo que había tenido todo el día. Cuando salió, se vistió y fue al piso de abajo, pero ya no estaba solo.

-¿Pero qué coño? ¿Como entrasteis?

-Tenemos llaves Fleddy, llamamos al timble pelo no abliste.

-Menudo susto me habéis dado pavos.

-¿Dónde está Gus?

-Viaje de trabajo, debió ser urgente porque ni me llamo neno.

-Ahm. ¿Todo bien?

-Si, hablamos esta mañana. Fue un ataque de pánico.

-¿Que le pasó a Dan?

-Nada importante, no te preocupes chino.

Pasaron una buena noche de risas y anécdotas. El chino cuando quería podía ser simpático y no tocarle las narices a Freddy, lo que le demostraba que solo lo hacía por molestarlo. No supo como sacar el tema sin preocupar a Bo y tampoco tuvieron tiempo a solas, por lo que Freddy se rindió en su plan de sonsacarle algo a su joven amigo. Luis era un crío encantador y dulce; pero dentro ocultaba una personalidad peligrosa y manipuladora. Era caprichoso y lo quería todo a su manera, solo cedía ante Bo; eran inseparables y tenían una relación extraña, que solo ellos entendían. Cuando ya era la madrugada, los chicos se fueron dejando solo en casa a Freddy.

El moreno estuvo pendiente del teléfono todo el tiempo; Gustabo no le llamó ni le envió ningún mensaje en toda la noche. Se quedó dormido en el sofá esperando noticias suyas, pero eso nunca pasó; cuando revisó su teléfono en la mañana, seguía sin haber noticias de él. Trató de llamarlo, pero su teléfono continuaba sin dar señal alguna; le envió mensajes esperando que los viera cuando volviera a tener algo de cobertura.

Doble CaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora