Los Fotógrafos

190 19 2
                                    

Capítulo 44

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Capítulo 44

Fernando y yo pasamos el día prácticamente durmiendo, quería salir a dar una vuelta, pero Fernando insistió en que mejor descansara, quería hacerme la fuerte, pero de verdad sí estaba cansada, y para mi sorpresa no me costó volver a conciliar el sueño.

A la mañana siguiente despertamos temprano, Fernando había preparado un viaje en un yate para los dos, así que nos cambiamos y fuimos al barco.

Era un yate bastante lujoso y algo grande solo para los dos. Salimos a alta mar, aparte de nosotros estaba el capitán y un chef.

Desayunamos en el barco, la vista desde el mar a la ciudad era maravillosa. Ambos nos pusimos traje de baño y nos lanzamos al mar a nadar, Fernando me tomó de la cintura.

-¿Te sientes mejor?

-Sí, dormí muy bien ayer, no recuerdo cuándo fue la última vez que dormí todo el día.

-¿Te parece bien que nos quedemos aquí todo el día? Aquí no hay periodistas.

-Está bien.

-En dos días tenemos que regresar.

-No quiero volver.

-Yo tampoco, pero necesitamos hacerlo cariño - me dio un tierno beso en los labios.

Volvimos al barco y tomamos un poco de sol.

El chef preparó el almuerzo y comimos. Disfrutamos lo que restaba del día en el barco y regresamos. No quiero volver a California, pero tengo pacientes que esperan, tengo un empleo y tengo que ser responsable.

Cuando llegamos al muelle, Fernando me tomó de la mano y me llevó a un lugar un poco apartado donde había una mesa para dos y velas.

-¿Tú preparaste esto?

-Sí, quiero que cada día y cada momento aquí sean especial, hace siete años debimos tener una luna de miel y no lo hicimos, lamento mucho no haber aprovechado todos esos años a tu lado, espero me permitas quedarme contigo muchos años más para compensarte todo ese tiempo.

-No tienes que disculparte - le di un beso - Importa el hoy y el ahora es perfecto, tal cual sucedió, no seríamos los que somos hoy de no haber pasado lo que nos pasó.

-Amor, quiero viajar contigo a muchos lugares, prometo que en cada aniversario lo haremos de ahora en adelante - No pude evitar sonreír, se me escaparon un par de lágrimas - ¿Qué sucede?, ¿por qué lloras?

-Estoy feliz de estar a tu lado, te amo.

-Yo también te amo - me dio un dulce beso.

Hizo una seña con la mano y el mesero comenzó a servirnos. La comida estaba deliciosa, tomamos vino y hablamos. Al regresar había un chófer esperándonos para llevarnos a casa.

Había periodistas detrás de nosotros, de hecho había más que el día anterior, siguieron la camioneta hasta la Villa, son un poco molestos la verdad, pero no puedo hacer nada.

Mi niñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora