El plan

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Capítulo 29 - El plan

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Capítulo 29 - El plan

Parece que me estoy comportando como una niña inmadura, pero realmente todo tiene una explicación, la primera vez que me deshice de los guardaespaldas sí fue por capricho, pero eso me ayudó a notar pequeños detalles, Giovanni y Fernando montaron alrededor mío un contingente que hace casi imposible que alguien a quien ellos consideran un riesgo se aproximen a mí, incluso movieron sus influencias para que no pudiera atender la emergencia, eso fue lo que me molestó principalmente, cada paciente que cae en mis manos es investigado para confirmar que no sea un peligro para mí, las cosas se están saliendo un poco de control así que en un arranque hice que los guardaespaldas me dejaran sola, pensé que solo era una exageración de mi hermano y Fernando todo eso, pero fue la primera vez que alguien que ellos quieren mantener lejos de mí se me pudo acercar y ese fue Fred.

Cabe destacar que eso lo descubrí mucho después de mi pelea con Fernando por la seguridad.

Para Paola es imposible acercarse a mí con toda la seguridad que tengo en este momento, por eso se me ocurrió una idea para hacerla salir de su escondite, no sé quién le esté ayudando y si es o no una persona lista así que para no arriesgarme a que mi plan funcione decidí no decirles nada a Fernando, ni a Giovanni, ellos no dejarían que lleve a cabo mi plan y son capaces de enviarme a Sicilia a la fuerza si saben lo que planeo.

Paola quiere algo, y ese algo soy yo, así que por qué no darle lo que quiere.

Flashback...

Después de ver como Fred aprovechó la ventana que yo creé cuando estaba sola se me ocurrió hacer lo mismo para Paola, claro, lo de Fred no fue planificado pero me sirvió.

Comencé a deshacerme de mis guardias para crear esos espacios, menos de Teo, él es parte de mi plan, al inicio cuando se lo comenté no le pareció.

Aparte de Teo necesitaba más personas, pero yo no tengo los contactos de Giovanni ni Fernando, así que acudí a mi padre, este tampoco creyó que mi descabellado plan tuviese pies y cabeza, pero como siempre me apoyó.

Al crear esas ventanas donde no tenía seguridad, siempre terminaba discutiendo con Fernando, eso no me pareció algo extraño o algo que tener en cuenta hasta que después de una discusión que tuve con él me llegó una nota, "parece que no todo es un cuento de hadas Isabella, tu esposo se volvió posesivo, pobre de ti, al menos cuando yo hacía berrinches me daba regalos costosos, parece que a ti no te da nada, lástima".

Cómo supo Paola de nuestras discusiones, en la casa no entrábamos más que Fernando y yo, pero no podía confiarme, así que con Teo revisamos cada rincón en busca de cámaras o micrófonos, pero no encontramos nada. Pero la duda no tardó en aclararse, resultó que cuando Paola se enteraba de nuestras discusiones estas ocurrían en el auto y el chófer de Fernando era el único aparte de nosotros ahí, así que lo investigamos.

Le habían estado haciendo transferencias pequeñas para pasar desapercibidas, pero eran constantes, lo que parecía un poco extraño, pero no era prueba suficiente, así que no hicimos nada con él por el momento, pero lo mantuvimos vigilado.

Mi niñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora