XXV,LA ÚLTIMA LLAMADA.

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Una vez que Lost salió de la casa de Serafín cerrando la puerta tras ella se liberó del espacio una tensión la cual Serafín y Jason no se habían percatado hasta que esa mujer se la llevó, sus cajas torácicas sintieron como si el peso de una llanta, que levemente se posó sobre ellos, se elevara y se fuera.

Serafín dio una fuerte bocanada de aire y estremecida se aferraba a la mesa, debía de controlar las reacciones de su cuerpo antes que un ataque de pánico se apoderada de ella.

-Serafín hija, ¿Qué te ocurre? ¿estás bien? -Le preguntaba Sophie la cual ansiosa de ver a su hija en ese estado se había levantado de su silla para atenderla -Mi amor ¿Qué te ocurre? ¿Por qué lloras?, ¿acaso te lastimó esa mujer? ¿Quieres agua?

Jason sentado cerca de Violeta al igual que Serafín intentaba controlar la conmoción de su cuerpo, a diferencia de su amiga, Jason no lloraba ni gemía, solo temblaba, su cuerpo se estremecía como si estuviese desnudo en la nieve.

- ¿Por qué tiemblas?, ¿Qué les ocurre a ambos? -Escuchó decir a Violeta.

Jason le pidió a Sophie que se apartara de Serafín. -Déjela Sophie, solo necesitamos recuperarnos un poco, ya se nos pasará, solo debemos de drenarnos un poco de esa energía maligna.

-No entiendo que les ocurre -Repitió Violeta irritada de verlos tan agitados.

-Quiero que te imagines en esta situación -Le dijo Jason con voz jadeante -Estas sentada frente a un león que tiene sangre en su boca y te ruje con fuerza y alza sus garras para intentar lastimarte y no te puedes mover porque ante el mínimo movimiento que hagas sabes que se lanzará a atacarte. Así nos sentimos, acabamos de estar frente a un león. -Jason se recostó sobre el espaldar y no dijo más.

-Tu sentiste algo? -Le preguntó Violeta a su hermano.

Eneldo negó con la cabeza, sus ojos abiertos de par en par agudizaban su sobrecogimiento. -Me dijo que soy débil -Susurró.

Pasaron varios minutos antes que pudieran salir de la conmoción. Estaban cerca de ser la media noche y todos seguían en la sala de estar. Sophie y Violeta comentaban cada palabra que Lost les había dicho repitiéndolas con incredulidad casi como si se estuvieran contando nuevamente lo ocurrido.

Eneldo por su parte permanecía en silencio con la mirada perdida al vacío.

Fue entonces cuando por primera vez en mucho tiempo el teléfono de Sophie sonó, era una llamada, la mujer sobresaltada se levantó del asiento para sacar el celular de la bolsa de su pantalón.

Al ver el número que le llamaba la mujer inmediatamente le pasó el teléfono a su hija -Es tu papá -Le dijo conmocionada.

Jason y Serafín se levantaron de sus asientos.

-Puede ser esa mujer fingiendo ser tu papá, pídele que te diga algo que solo ustedes sepan -Le susurró Jason antes que Serafín contestara.

-Hola? -Contestó nerviosa.

Una voz con echo sonó - ¿Serafín?, ¿eres tú?, soy yo, soy tu papá hija, que gusto escuchar tu voz -Le dijo.

- ¿Cómo sé que en verdad eres mi papá?, dime algo que solo tú y yo sepamos. -Contestó Serafín.

La voz se quedó en silencio.

-Hace mucho tiempo, cuando tenías 6 años fui por ti a la escuela y vi como un niño se burlaba de ti porque te faltaba un diente, me molesté con ese niño he hice algo inmaduro, fui hasta él y me burlé de sus grandes orejas. Te pedí que no lo comentaras con nadie y que fuera nuestro pequeño secreto.

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⏰ Última actualización: Oct 24 ⏰

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