Celos, demasiados para mi gusto

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-Lo lamento -me dijo en un susurro apenas dejar mis labios, acto seguido salió del cuarto corriendo, ¡se va corriendo! ¡después de besarme se va corriendo! ¡maldito inutil!

Si algo me queda claro en mi basta experiencia besando chicas es que cuando le robas un beso a alguien lo que menos haces es pedir perdon y salir corriendo, eso es de cobardes. Lo que se tiene que hacer es quedarse y afrontar las consecuencias, ya sean una noche de sexo salvaje descontrolado o una fuerte bofetada, ¡lo que él hizo no se hace! Aunque tengo que admitir que no tengo experiencia de como se reacciona después de besar un chico... digo, muchas chicas me han robado un beso y he visto varias de sus reacciones pero jamás me había besado un chico ¿eso cuenta como una clase de primer beso? ¿como si fuera el primer beso gay? Oh rayos, ¡yo no quería que mi primer beso gay fuera con el presumido de Cody! ¡de hecho no quería tener un primer beso gay!

-¡Hey! Ahi estas -apareció por la puerta un Brad sonriente con dos chicas a los lados, una rubia y con actitud y la otra morena con menos personalidad, las dos estaban con una ropa bastante corta y se agarraban a Brad de la cintura.

-Hm... hola -dije aún medio aturdido, ¿que? No siempre se recibe un beso de un chico... no cuando tu tambien eres un chico.

-Tio, ¿estas bien? -¡no! ¡tu hermanito a pesar de que le conseguiste un nuevo novio me besó a mi! Aunque fui yo quien lo apartó de aquellos chicos... ¡pero eso no tiene nada que ver! ¡eso no le daba el derecho a besarme!

-Si claro, de maravilla -contesté fingiendo una sonrisa, el al parecer estaba lo suficiente tomado para no darse cuenta de que mentía por lo que lo dejó pasar.

-Bueno pues para que te animes y veas que no solo le conseguí a alguien a mi hermanito aqui te traigo a estas dos hermosuras para que te hagan compañia -en un abrir y cerrar de ojos las dos chicas que estaban abrazadas a la cadera de Brad se pasaron a la mia, y a pesar que la morena no se veía muy bien con respecto a la actitud las dos habían comenzado a hacer cosas ricas, bueno esto me ayudará a recuperar la hombría que el beso con Cody me quitó.

-Gracias bro, ahora largate y dejame solo con estas preciosuras.

-Pero... este es el cuarto de mi hermano -comentó él, bueno eso le enseñaría a Cody que no me va a pasar a su bando.

-Que duerma contigo, seguro que se emborracha tanto que ni se da cuenta que no duerme en su cama -Brad aún lo dudaba- además, no vamos a estar toda la noche, con suerte y terminamos antes de que venga a dormir.

-Vale -Brad accedió y sin mas salió de la habitación, dejandome solo con las dos hermosuras de chicas que esta noche tenía para mi, que hermosa es la vida.

*

-Maldito desgraciado -me giré a las hermosas palabras con las que Rosela me habló para al instante sentir mi mejilla arder, me la tomé rapidamente y antes de que alguien mas nos viera (ya que por suerte en estos momentos no habían muchos en las canchas de fútbol) la llevé atras de las gradas.

-¡¿Acaso estas loca?! No perdón, claro que estas loca, de remate ¡de remate!

-¡A mi no me dices loca! Sé muy bien lo que hago, pero al parecer tú aún no.

-No tengo la menor idea de lo que estas hablando -le respondí con cansancio, esta maldita chica es una cabrona manipuladora, lo mejor es ignorarla.

-¿Que no sabes? Hablo de que te acostaste con las dos putillas esas que trajo Brad en la fiesta de su hermano el maricon.

-¡Oye! En primero no te interesa en lo mas minimo con quien, o quienes me acuesto, y en segundo no vas a volver a insultar a Cody delante de mi -¿que acabo de hacer? ¡acabo de defender a Cody! ¡al maldito que me besó y luego me dejó solo.

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