Capítulo 7

7.1K 602 34
                                    

× Cuando la vida te deje desamparada y sola
Estaré en tu puerta esta noche
Si necesitas ayuda
Apagaré las luces de la ciudad
Mentiré, engañaré, rogaré y sobornaré
Para hacerte sentir bien ×

*Phillip Phillips - Gone, gone, gone

— ¿Me dirás qué pasó? —preguntó Liam en cuanto llegó a mi apartamento al día siguiente.

Él se había quedado hasta altas horas de la noche en mi habitación, cuidándome mientras yo lloriqueaba como niña pequeña asustada. Sabía que Liam ya estaba enterado de mi secreto, pero después de mi performance del día anterior y mi cara esta mañana, me sentía bastante humillada como para contarle los detalles de mi triste pasado.

—No quiero hablar de eso ahora —susurré y me fui a mi habitación. Pero en cuanto Liam me siguió, supe que no se iba a quedar tranquilo con mi respuesta.

Me lancé sobre la cama y me tapé completamente con la sábanas. Lo único que quería era estar todo el día allí y no salir jamás. Sólo desaparecer.
Mi habitación era un desastre al igual que mi cabeza; ropa tirada, platos con helado y envoltorios de chocolate y papas fritas que había demorado solo media mañana en devorar.

—Anoche prometiste que me lo dirías —contrarrestó.

—Porque anoche era un desastre —lloriqueé. Mi voz salía amortiguada a causa de las múltiples frazadas que había puesto como barrera entre él y yo.

—Ahora también eres un desastre.

Sentí como las mantas eran arrebatadas de mi cuerpo y pataleé. — ¡No quiero, no quiero, no quiero! —gimoteé y Liam rió.

—Tienes que salir de esa cama y darte un baño ahora ¡hueles horrible!

— ¡No inventes! —reí ofendida—. Ni siquiera llevo aquí un día.

—Y no lo estarás —noté la picardía en su mirada e intenté huir.

Pero ya era tarde.

Liam corrió hacía mi y me levantó con sus fuertes brazos hasta sacarme de la cama, mientras yo trataba son éxito de patearlo y morderlo. A duras penas y tropezando con el caos de mi habitación, me llevó hasta el baño entretanto abría la llave del agua y me metía dentro de la tina.

— ¡Está fría! —grité—. ¡Maldito!

Cuando al fin me soltó, apenas pude cerrar el agua y ver como se reía de mi en mi propia cara.

— ¡Te odio! ¡Te odio! —grite salpicándolo con el agua que había quedado debajo de mi. Liam trató de correr, pero resbaló con uno de los pequeños charcos que se habían formado con la improvisada lluvia que  habíamos formado en mi cuarto de baño. Calló estrepitosamente al piso y yo estalle en carcajadas, él también rió y eso me alentó a carcajear aún más fuerte. Me senté en la bañera tratando de aminorar los fuertes calambres de mi estómago producidos por la risa.

No me había dado cuenta hasta entonces que Liam era bastante guapo y a la vez tierno; tenía grandes ojos castaños que se achinaban cuando sonreía, sedoso cabello y un cuerpo bien formado. Por supuesto también comprobé que si era un gruñón y sobre todo un mandón, pero cuando no se portaba como un completo idiota conmigo, congeniábamos bastante bien.

— Ok, ok —Liam dejó de reír, se levantó y limpió sus pantalones—. Date una ducha y te esperaré afuera. Llamaré a alguien que limpie ese desastre.

Asentí limpiando las pequeñas lágrimas que habían caído de mis ojos —esta vez a causa de la risa— y esperé a que Liam saliera del baño para sacarme el pijama mojado y darle a la llave del agua caliente.

Paparazzi » Harry Styles (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora