Besé a Harry como nunca había besado a nadie antes. No solo porque ahora estaba segura de mis sentimientos por él, sino también porque jamás alguien había hecho por mi algo tan hermoso y romántico como lo que Harry había preparado esa noche.
Ahuequé su rostro con mis manos y lo atraje hacia mi. Lo besé, fuerte, queriéndolo todo de él. Quería dar el siguiente paso. Tomé sus rulos entre mis dedos y tiré de ellos provocando que gimiera. Besé su cuello y mordí su oreja tratando de llevarlo al limite.
—Hey... —me advirtió separándose un poco—. Más lento.
Me sentí avergonzada. No quería ir más lento.
—Quiero esto —dije por lo bajo, sin un ápice de vergüenza.
Vi una tímida sonrisa aparecer en sus labios y le sonreí de vuelta. — ¿Estás segura? —me preguntó.
—Demasiado —respondí.
Harry tironeó de mi brazo y me ayudó a levantarme del borde de la construcción. Me tambaleé un poco y temí estar demasiado borracha como para no saber que rayos estaba haciendo, pero a la vez, estaba más convencida que nunca de mis sentimientos por Harry; y si de algo estaba completamente segura, era de que estaba perdida e irremediablemente enamorada de él.
Después de caminar en la oscuridad entre tropiezos, risas, besos y toqueteos para nada inocentes, llegamos a la entrada de la casa de su madre. Harry sacó las llaves de sus ajustados pantalones y mientras intentaba abrir la puerta, yo besaba su cuello con picardía.
—Jamás lograré abrirla si sigues haciendo eso —me advirtió, pero yo seguí con mi cometido, riendo entre besos. Un cosquilleo se instaló en la boca de mi estomago al oírlo reír también.
Cuando al fin logró abrir la puerta y estuvimos adentro, sentí el inexplicable cambio de atmósfera. Mi respiración se hizo más pesada. Era increíble lo mucho que deseaba tocar a Harry y que él me tocara también.
Me acorraló contra la pared, tan lento que me hizo jadear. Sus labios recorriendo mi cuello suavemente. Quería terminar con la larga espera y ser completamente suya al fin y recordé todas las veces en que había soñado despierta con este momento. Necesitaba tanto de él que llegaba a asustarme estar volviéndome loca o algo por el estilo.
Traté de mantener la calma cuando me besó y sus manos recorrieron mi cuerpo sobre mi vestido, pero no pude evitar temblar ante su delicado toque, que me hacía desearlo cada vez más. Su lengua entró con cuidado en mi boca, pero yo no quería que fuera cuidadoso, no esa noche. Tomé su mano y tiré de él hasta llegar a la habitación. Cerré la puerta tras de nosotros con cuidado para no despertar a su madre o a su hermana y mordí mi labio a causa del nerviosismo.
Harry se adelantó y mientras yo me quitaba mis costosos zapatos de tacón, él sacaba de la cama las cosas que habíamos dejado tiradas antes de irnos a la fiesta. En cuanto acabó y se sentó sobre el colchón deshaciendo el nudo de su corbata, me armé de valor y caminé hasta el bajando el cierre de mi vestido. Mi corazón se instaló en mi boca, ansiosa y a la vez nerviosa por lo que estaba a punto de pasar.
Nos besamos. Él encima de mi. Disfruté de sus labios succionando los míos gentilmente, pero aún necesitaba más. Como oyendo mis pensamientos, las manos de Harry volvieron a recorrer mi cuerpo, esta vez con mas urgencia que la anterior. Solté un audible jadeo cuando apretó mi trasero y recorrió mis piernas con su suave tacto. Me separé levemente de él mientras trataba de desabotonar su camisa, sin mucho éxito gracias a mis temblorosos dedos, pero cuando al fin lo logré mi respiración se cortó nuevamente. Él era simplemente hermoso; tatuajes adornaban su cálida piel, que me di el gusto de tocar a mi antojo. Un gemido salió de sus labios cuando rasguñé suavemente su espalda mientras le susurraba al oido lo mucho que me gustaba que me tocara.
El ambiente se hizo cada vez más caliente y cuando Harry bajó la cremallera de mi vestido, sabia que no había vuelta atrás.
— ¿Estás segura, Madison?
—Muy segura —respondí.
La tela del vestido abandonó por completo mi cuerpo y su manos recorrieron mi piel desnuda. En un momento de valentía, desabroché mi sujetador y lo lancé lejos, para luego tratar de sacar con dificultad el cinturón de Harry.
En minutos, ambos estuvimos completamente desnudos disfrutando del cuerpo del otro, besándonos, tocándonos y amandonos...
— ¿Estás bien? —me preguntó Harry cuando estuvo dentro de mi, al ver mi cara de dolor.
—Si —respondí—, solo ha pasado mucho tiempo.
Empujó una vez más dentro de mi. — ¿Más?
—Si —gemí en respuesta y él volvió a moverse, pero sin detenerse esta vez, acelerando cada vez más sus movimientos. Me sostuve de sus caderas con mis piernas, presionando mis uñas en su espalda, tratando de no gemir demasiado alto.
La fricción de nuestros cuerpos era tan placentera, que al poco tiempo me sentí temblar bajo el cuerpo de Harry, susurrando y balbuceando su nombre en medio de un abrasador orgasmo. Después de unas cuantas embestidas más, lo sentí temblar también. Él cayó rendido a mi lado, sudoroso, con los rizos despeinados y los labios rojos e hinchados. Sonreí, sabiendo que yo era la causante de que estuviera en esas condiciones.
—Te quiero —me dijo, recuperando el aliento.
—Te quiero —le respondí, para luego abrazarlo y cerrar los ojos, agotada.
***
WENO, capitulo corto y demorado porque no se escribir coxinadas y la pensé caleta men :( mañana tal vez suba el siguiente que ya tenia escrito casi entero.
VOTEN Y COMENTEN, LAS AMO, SODEXO :*
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Paparazzi » Harry Styles (COMPLETA)
FanfictionPara muchos, la privacidad puede ser una de las cosas más habituales en la vida... pero si eres la mundialmente famosa cantante pop Maddison Peters, la tan corriente privacidad se vuelve un privilegio. Acosada por fans e innumerables paparazzis que...