Paparazzi » Harry Styles (COMPLETA)

Capítulo 43

Me desperté, sola. Por un segundo pensé que todo lo que había pasado la noche anterior era un sueño, pero en cuanto me vi en el espejo del baño, el dolor de mi cabeza se hizo presente y mis ojos hinchados revelaban que las lagrimas de la noche anterior si fueron de verdad.

¿Que pasaría ahora? ¿Como debía comportarme con Caleb? Ni siquiera sabia que si lo que había sucedido la noche anterior significaba que me perdonaba. Tampoco sabía que sucedería entre papá y Caleb, porque era obvio que esa relación estaba mas que rota.

Decidí bajar a desayunar, los rayos de sol se colaban por mi ventana y una calida sensación me invadió. Por un momento pensé que si Caleb podía aceptarme de nuevo, todo podía cambiar para mi. Tal vez podríamos hablar con papá los dos juntos y hacer que entendiera nuestros puntos de vistas, también buscar una casa juntos, donde cada uno pudiera ser lo que quisiera sin ningún tabú o limitacion. Y era que me moría de ganas de volver a conocer a mi hermano, de que me contara todo lo que había pasado en su vida en los años que estuve fuera y conocer a su novio, la persona de quien Caleb estaba enamorado. No me importaba si era mujer u hombre, solo me importaba que mi hermano fuera feliz.

Me di una ducha y bajé a desayunar. Solo papá estaba sentado en la mesa tomándose un café.

—Buenos dias —dijo sin levantar la mirada del diario que estaba leyendo. Era temprano aun para saber que había hecho con los paparazzis, me asomé a la ventana al levantarme y no vi nada sospechoso.

—Buenos dias —respondí.

—Tengo que hablar contigo sobre algo.

—Yo también, papá —dije y era verdad. Necesitaba saber que sucedió con Nick y tenia que aprovechar que el parecía querer comunicarse conmigo.

—Lo mio es mas importante.

Y ahí estaba. El no tenia ni la mas mínima intención de saber lo que quería decirle.

— ¿Por que no me lo dijiste? —pregunté sin contenerme. Necesitaba escucharlo, necesitaba oír a papá decirme con sus propias palabras que había enviado a uno de mis mejores amigos a la carcel.

Sus ojos se cruzaron con los míos y al parecer, por su mirada apagada, supe que el sabia exactamente de lo que estaba hablando.

—No tengo que decirte acerca todos los delincuentes a los que mando a la carcel, Madison.

— ¿Delincuente? ¿De verdad? Es Nick de quien estamos hablando —la manera tan cruda de referirse a uno de mis mejores amigos me puso la piel de gallina. Yo sabia que papá en su trabajo era completamente distinto a como era en casa, me había tocado verlo en juicios, pero parecía que ahora el no dejaba atrás la faceta del juez duro e implacable en el tribunal, sino que ahora era la misma persona en ambas partes.

—La persona que estaba frente a mi en el estrado no era Nick.

—Ya —rodé los ojos. Aun sentía miedo, pero mas que eso sentía rabia—. ¿Entonces quien rayos era? porque te recuerdo que mi primer amigo del jardín de niños, que me defendió de todos los niños que eran crueles conmigo, era ese chico que metiste en prisión por años.

—Ese no era el Nick que conociste. Solo era un drogadicto, con amplio prontuario criminal, buscado por trafico, robo a mano armada y homicidio. ¿Quieres que siga?

—¿Y si era tan mal hombre por que no lo enviaste a la silla eléctrica?

—Madison, basta.

—Solo déjame entender —pedí. Quería presionarlo. Necesitaba que me dijera la verdad, que se abriera conmigo y me dejara saber lo que pensaba en realidad de mi.