༄ Tristan ༄
Entré al hospital recorriendo atentamente a cada chico, en la llamada había mencionado algo de rotaciones clínicas, también había dicho varias áreas pero no podía recordar el orden.
—Buenas tardes ¿Lo puedo ayudar en algo?
Observé a la chica que sonrió desde la recepción, parecía amable.
—Buenas tardes— devolví el gesto —Busco a un interno.
—¿Tiene relación con él?
—Soy su padre...
—Esperé— su cabeza se ladeó con suavidad —Lo he visto en algunas fotos.
—¿Enserio?
—Si, es papá del ojeroso ¿No es así? ¿Es el señor Williams?
—Del ojeroso, si— reí suavemente —Tristan, mucho gusto.
—Igualmente, señor Williams. Soy Beca— sonrió formalmente —Esta en cardiología...si va por este pasillo y dobla a la derecha al final logrará ver las puertas.
—Muchas gracias— asentí formalmente girando para seguir sus indicaciones y efectivamente, crucé las puertas al abrirla entrando al área de cardiología.
Cay solía decir que era de sus áreas favoritas, pensaba estudiar una especialidad y aseguraba que sería esta.
Comencé a caminar despacio por el lugar, no había mucha gente gracias a la hora por lo que sería fácil encontrarlo.
—Miocarditis.
Ahí estaba.
Su voz era fácil de reconocer a pesar de que había cambiado bastante, ya sonaba totalmente madura y no era por nada. Acaba de cumplir 23 años hace un par de semanas.
Me apoyé en el marco de la puerta observándolo con una inevitable sonrisa, ya llevaba una bata blanca y aquel estetoscopio colgado del cuello.
—¿Qué es eso? ¿Me voy a morir?—No, no te vas a morir— respondió mirando al chico en la camilla que estaba apunto de soltarse llorar. Era joven, debía tener aproximadamente unos 16 años —Tienes suerte de que sea un grado leve, es tratable y curable— cruzó sus brazos apoyándose en la pared —Eres demasiado joven para estar pasando por esto, consumir...
—No consumí...
—Metanfetaminas y éxtasis, parece que elegiste las peores, son de las que tienen mayor probabilidad para causar esta enfermedad y vaya que esto es raro. Normalmente se da por infecciones virales o bacterianas— lo cortó de vuelta —Mis compañeros ya están explicándoles a tus padres todo esto, te advierto que tendrás que asistir a sesiones psicológicas y llevar el tratamiento al pie de la letra— se acercó a él ayudándolo a acomodar la almohada —Este consiste en un reposo absoluto, medicamentos y terapias de apoyo. Vas a dormir aquí dos días para poder monitorearte, si todo va bien podrás volver a casa ¿Entendido?
—Si...
—Se que piensas que tienes al mundo en tus manos justo ahora...y prácticamente es así, pero esta no es la manera en la que debes tenerlo. Solo tienes 15 años, te faltan muchas cosas por vivir, muchas experiencias que afrontar, créeme que tomar este camino no te va a llevar a nada bueno. Y no te lo digo como médico o papá, porque todavía no soy papá— aclaró dándole una pequeña sonrisa —Te lo digo como alguien que también pensó que beber, fumar y drogarse iba a mejorar todo. Nunca será así, lo que puede "ayudarte" por horas puede perjudicarte de por vida...creo que has podido notarlo.
ESTÁS LEYENDO
𝑫𝒆𝒔𝒅𝒆 𝒄𝒆𝒓𝒐
General FictionTristan y Caleb, hermanos que fueron separados hace años pero ahora al tener dificultades familiares, volverán a reencontrarse aunque no sea de la mejor manera posible. //Contiene spanking familiar, si no es de su agrado NO lea, gracias 💗.