𝑫𝒆𝒔𝒅𝒆 𝒄𝒆𝒓𝒐

Cap 31

༄ Caleb ༄

—¿Pádel?— desbloqueé el auto.

—¿Por qué no?

—¿Quién va?

—Matt, Nick, Owen, Ben, Zed, creo que Daniel también.

—¿Daniel? ¿Quién lo invitó?— dejé las llaves en el porta vasos encendiendo el coche después de ponerme el cinturón al igual que Jere.

—Supongo que Zed— se encogió de hombros manteniendo abierto el chat —¿Entonces?

—Tu llamarás a María para convencerla.

—Perfecto.

—¿Dónde es?— revisé los alrededores antes de dar reversa.

—Toma la avenida principal, está un poco antes del letrero de salida.

—¿Tan lejos?

—¿Lo quieres al lado de casa?

—Nos queda como a treinta minutos.

—Da igual.

—¿Irá Ellie? ¿O Dove?— cuestioné parando en el semáforo.

—No, Romeo, no van. Es tarde de chicos así que mándale mensaje a tu novia y después deja el celular junto al de todos los demás.

—Bien— le pasé mi celular para que pusiera música.

Tardamos un poco más en llegar gracias al tráfico pero hubo tiempo suficiente para convencer a Maria.

Todo el día había sentido la incomodad de que tenía que hacer algo pero no podía recordar qué, en el desayuno me concentré en pensarlo a fondo pero no obtuve nada así que lo dejé.

Si fuera algo importante lo hubiera recordado.

Estacioné el auto bajando junto a mi hermano, no había jugado pádel muchas veces por lo que no era mi fuerte pero podría intentarlo.
Busqué a los chicos con la mirada encontrando primero a Owen, tiré de Jere hasta llegar a la cancha que habían apartado.

Saludé a todos quedándome junto a Ben que me tendió una pala, la recibí sentándome en las gradas escuchándolos discutir por quién jugaba primero.

—¿Convenciste a tu padre?— Ben se sentó a mi lado.

—Jere llamó a María.

—¿Comiste algo?

—Compré unas sabritas en la escuela— rasqué mi nuca —Pero desayuné bien, así que no hay problema. En casa comeré algo.

—Pensábamos ir a comer después.

—Eso suena mejor.

—Primero hermanos contra hermanos— Nick apuntó a Owen y a Matt antes de hacerlo con Jere y conmigo —Dejen los celulares en las gradas y quien lo tome primero sin ser urgente paga la cena.

Al levantarme lo coloqué junto a los otros, no tenía ningún mensaje hasta el momento así que no tenía porque llevarlo conmigo.