Epílogo

36 8 0
                                    

Felix vomitó por quinta vez en el día, a su lado Minho sobaba su espalda en signo de consuelo, el bullicio de la ciudad se colaba por la ventana del baño y Felix tuvo que exhalar profundo antes de levantarse del suelo y tirar la cadena del retrete, tomo asiento sobre la tapa del inodoro y sintió como Minho limpiaba las lágrimas qué de sus ojos habían salido ante el esfuerzo.

— Tranquilo, lávate los dientes y yo iré a hacerte un té ¿esta bien?—

Felix al fin abrió sus ojos, mirando los de Minho qué ya lo veían con ese brillo especial que habían adquirido desde que se enlazaron hace cinco meses atrás, donde dos meses después habían descubierto que estaban en espera y ahora su bebito tenía tres meses de gestación.

— Gracias, Min, me iré a acostar —

Minho lo ayudó a llegar a la cama, hace cinco meses el celo de Minho lo había golpeado y fue inevitable para él alejarse de Felix, por más que se reprimío, Scar tomó el control y mordió a Felix, creando así el preciado lazo que ahora ambos compartían, Minho se había asustado muchísimo cuando la lucidez estuvo en él de nuevo, la marca de Felix estaba bien, pero no había vuelto a despertar desde entonces, llamó a Volkov y este lo felicitó diciendo que afortunadamente Felix había soportado su marca, que solo estaba débil por el esfuerzo que su cuerpo hacia al estar vinculado con uno superior al suyo como lo era el del lobo, cuando salió embarazado, Volkov le explicó que solo era el cuerpo de Felix respondiendo a los deseos de Scar, sin embargo su embarazo era de alto riesgo y es por eso que se habían mudado a la ciudad donde Felix podría recibir los cuidados necesarios, también en los mejores lugares debido a que la fortuna de Andrew había quedado a su nombre.

— Toma, Hyunjin dice que es bueno para el estómago —

Una taza de té de manzanilla fue dejada en las manos de Felix, sonrió hacia su Alfa, agradeciendo el gesto con un besito volador que hizo reír al mayor de ambos.

— Por cierto ¿como esta él y los niños?—

Minho sonrió pensando en su manada, esa que había tenido que dejar a cargo de Changbin mientras cuidaba de su familia, de su hermoso sol y de su solecito que venía en camino, Changbin tenía un gran apoyo, Chan y Jeongin quienes eran tan territoriales y precavidos, tanto que hacían las rondas nocturnas de manera extendida, siendo apoyados por Seungmin en las mañanas, agradecía que su ausencia fuera muy bien remplazada.

— Muy bien, Chae y Niki ya tienen ocho meses, los miré ayer cuando fui a traer hierbas para tus tés en la manada, Hyunjin está complacido de que los resultados de Chae sean positivos al criarla solo con sangre animal como lo hicieron con él —

Eso alegró a Felix, los gemelos habían sufrido mucho tras su nacimiento, la separación que les dieron más la necesidad de Chae y el estado delicado de Niki, habían hecho que sus primeros meses fueran muy difíciles, Hyunjin casi vio factible aceptar la propuesta de Volkov, cuando la pequeña los sorprendió de sobremanera al aceptar la sangre animal por fin, luego de tanto sufrimiento.

— Eso me alegra, cuando nuestro bebito nazca y tenga tres meses, quiero que nos mudemos a la manada, quiero que crezca como su papá lo hizo—

Minho frunció el ceño, no muy convencido con eso, para él, el bosque era muy peligroso para los humanos, un lobo podía caer de metros de altura y estaría bien, pero un humano no y su mayor miedo era perder lo que más amaba.

— Hablaremos de eso después, ahora lo importante es que estén bien—

Felix iba a reprochar pero Minho lo calló con un beso, un beso largo y dulce, tal como le gustaban a Felix, sus manos fueron a parar al fuerte pecho del Alfa, mientras este dejaba suaves caricias en el vientre algo abultado del menor, Felix suspiró feliz cuando el olor de Minho empezó a esparcirse por la habitación.

We Talk To The Moon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora