Capitulo tres ꗃ San Juan, Puerto Rico ꗃ 7 de Noviembre del 2023
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-Tienes aproximadamente un mes de embarazo, casi llegando a los dos, Pau- dijo la obstetra moviendo el transductor por mi barriga, examinándome con detenimiento.
Me miré el vientre, sintiendo una mezcla de emociones.
- ¿Por qué no viniste antes?-preguntó la obstetra, levantando una ceja.
-Lorena, te juro que no sabía que lo estaba-respondí, viendo el ecógrafo. El bebé parecía una bolita pequeña, y era increíble sentir y saber que esa bolita poco a poco iba creciendo.
La obstetra examinó el ecógrafo con detenimiento.- El feto ya casi tendrá el segundo mes de embarazo. ¿No se te hizo raro sentir mareos o vómito?
Quitó el transductor y me pasó una toalla para quitarme el gel.
- Solo sentía fatiga, como siempre, por mi trabajo, claro está- respondí, limpiándome.
-Es normal. Tal vez tu pareja sintió los síntomas en vez de ti. Eso se llama embarazo psicológico- La obstetra asintió con la cabeza rodando su silla- Ya puedes bajarte, Pau.
Me bajé de la camilla, sintiendo una mezcla de emociones. La noticia del embarazo todavía me parecía irreal, pero al mismo tiempo, me sentía emocionada y ansiosa por conocer a mi bebé.
La obstetra me sonrió y me dio una palmada en la espalda.-No te preocupes, Pau. Todo va a estar bien. Te voy a dar algunas indicaciones para que puedas cuidarte durante el embarazo. Te espero el próximo mes en esta misma fecha.
Me dio una hoja con algunas instrucciones y me recomendó que volviera a verla en un mes. Me despedí de ella y salí de la consulta, sintiendo una mezcla de emociones.
Al salir de la consulta, me encontré con Gia, que me estaba esperando en la sala de espera. Me miró con una expresión de preocupación.
- ¿cómo te fue?- pregunto Gia, agarrándome de las manos.
- Bien, me siento tranquila- respondí- El bebé está bien, a pesar de toda la cafeína que bebí en octubre.
Gia me miró con una cara de disgustada, y yo me reí.- Quita esa cara, el bebé está bien, ya te dije.
Ella rodó los ojos y empezamos a caminar hacia la salida de la clínica, dirigiéndonos hacia el parqueadero.
- ¿Y Meredith?- pregunté, al no verla por primera vez sin la nena desde que nació mi sobrina. Gia siempre estaba pegada a ella como chicle, y era normal verla junto a ella en cualquier lado.
- Está con su papá en el estudio- respondió Gia.- Dijo que solo era para retirar una plata de la última canción que sacó y que se devolvían pa' la casa. Entonces, aproveché para venir a darte cuenta de ti.
