La vida de Blair Jones ha sido una constante pesadilla luego de la pérdida de sus padres. Todo comienza a cambiar cuando se muda a Inglaterra por su nuevo contrato musical...
Con una nueva vida por crear, y personas nuevas por conocer, Blair asiste...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Caminé lentamente entre las lápidas, sintiendo como el silencio invadía mi alrededor. Cuando llegué, me arrodillé, colocando un ramo de flores sobre el mármol frío.
Había pasado mucho tiempo desde la última vez que visitaba este lugar, donde descansaban mis padres.
—Hola. —dije en voz baja, sintiendo las lágrimas acumularse en mis ojos. —Los extraño tanto, lamento no haber venido antes...
Me quedé en silencio por un momento. Había tantas cosas que quería decirles, tantas cosas que habían pasado desde que se fueron.
—Estoy cumpliendo mi sueño, la música va muy bien. —continué, tratando de mantener mi voz firme. —Acabó de presentarme en el escenario donde fuimos la primera vez a ver a mi banda favorita, cuando apenas era una niña.
Mire las flores, tratando de contener mis lágrimas.
—Se que ustedes estarían orgullosos de mi...
Recordé la primera vez que papá insistió en que mamá me inscribiera en clase de música, tenía apenas ocho años, y él ya creía en mí.
—Ahora que vivo en Londres, me gusta la ciudad.... —dije, sonriendo a través de las lágrimas. —También conocí a alguien, su nombre es Lando. Creo que es un buen chico, lo conozco poco, pero me hace sentir especial, y creo que a ustedes les caería muy bien.
Me quedé allí, hablando con ellos, contándoles sobre mis logros y mis miedos, las veces que quisiera celebrar con ellos, y lo sola que me siento a veces.
—Los extraño todos los días. —susurré.
Me levante, sintiendo paz, me despedí de ellos con una última mirada y me dirigí hasta la salida de el cementerio. Mientras caminaba, sentí que una parte de mí había sanado. Estas es de las pocas cosas que extraño de California, visitarlos cada vez que quería hablar con ellos.
Justo cuando estaba por salir, escuché una voz familiar detrás de mí.
—Blair, ¡espera!.
Apenas giré, mi cuerpo quedó completamente paralizada, Noah estaba parado a unos pasos de mi, con su mirada fija en mi.
—¿Qué carajos haces aquí?. —pregunte, tratando de mantenerme en calma.
—He estado tratando de hablar contigo, desde que me enteré que estabas de vuelta. —dijo, con una expresión de arrepentimiento en su rostro.
—¿Entonces para eso fuiste a mi concierto?.
Él asintió. —Pensé que no me habías visto, quería verte, necesitaba pedirte perdón, perdón por todo.
Negué mirándolo. —No necesito que te disculpes, he cambiado, y mi vida también. No quería volverme a cruzar contigo.