La vida de Blair Jones ha sido una constante pesadilla luego de la pérdida de sus padres. Todo comienza a cambiar cuando se muda a Inglaterra por su nuevo contrato musical...
Con una nueva vida por crear, y personas nuevas por conocer, Blair asiste...
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Desperté con la luz del sol a través de la ventana del hotel en mi rostro, al girar la cabeza, me encontré con Blair, dormida a mi lado. Una oleada de emociones me invadió al darme cuenta de lo cerca que estaba. Me quedé mirándola, su cabello rubio caía desordenado esparcido por toda la almohada, lo que me hizo sonreír de lado.
No pude evitar pensar en lo mucho que me gustaba tenerla cerca, por eso la había invitado a verme en la carrera...era la excusa para estar más cerca, y conocerla más.
Desde que la conocí siempre intento hacerme cercano a ella.
Aunque los primeros días ella solo me ignoraba.
Mientras seguía observando cada detalle de su rostro, vi como sus ojos se abrían lentamente, entre dormidos, como si supiera que la estaba mirando. Cuando nuestros ojos se encontraron una sonrisa se dibujo en su rostro.
¿Cómo podía verse tan perfecta, acabando de despertar?.
—¿Norris?. —murmuró, aún atrapada en el sueño.
—Buenos días. —respondí. —¿Como dormiste?.
—Bien, mejor de lo que pensaba. —añadió con una voz soñolienta que me hizo reír. —Aunque en varias ocasiones, casi muero del frío, debí ponerme una sudadera.
—Podrías haberme abrazado. —reí y ella me miró.
—Ya quisieras, Norris.
—¿Porque me llamas siempre por mi apellido?.
—Me gusta. —susurró.
—¿Mi apellido? si tanto te gusta puedo dárselo a tus hijos. —bromee y ella puso los ojos en blanco.
—Solo me gusta llamarte Norris, tonto.
—Creo que eres la única persona que me dice así.
—Lo sé, soy exclusiva ¿verdad? solo yo puedo decirte así.
—Me gusta cuando lo dices.
Ella se cubrió el rostro con las manos.
—¿Porque te cubres el rostro? ¿te pongo nerviosa?.
—Me da vergüenza.
—¿Qué cosa?.
—Recordé que recién estoy despertando, seguramente estoy horrible ahora mismo.
