Capítulo 23: Entre las alcantarillas & ¡¿qué resguardaba el basilisco?!

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Narrador Omnisciente...


Kendra Prince irradiaba felicidad, ya tenía en su poder el conocimiento, solo faltaba que pusiera en práctica lo recientemente adquirido. Slytherin temblaría al escuchar su apodo, ella sería más temeraria... que esos tontos merodeadores.

[...]


Fred y George Weasley se encontraban atontados en la enfermería. Madame Pomfrey no sabía que darles, el embobamiento se pasó rápido y luego de un poco de reposo estaban aparentemente perfectos... salvo que habían perdido su toque...

-Pevees se reía de su incertidumbre-

[...]


-Hola Fred, George.

-Hola Harry, respondieron al unísono.

Los gemelos se veían desganados a lo lejos, pasaban los días y no había nada que los animaras, sus típicas bromas habían desaparecido, no quedaba huella de su toque, la chispa había desaparecido y parecía como si al resto del mundo no le importara en lo absoluto; Salvo a sus amigos, ellos sí que lo notaban. Después de todo fue un gran cambio.

[...]


-Harry, Harry...

-¿Que sucede Kendra?

-¿Porque estas así? Todo desganado...

-Estoy preocupado.

-¿Preocupado? ¿Porque?

-Por mis amigos.

-¿Que amigos?

-Los gemelos Weasley, han estado raros desde su presunto ataque.

-¿Quién los ataco?

-Aún no se sabe.

-Ahh.



Kendra Prince...


Entonces aun no lo sabían. Espera que estoy penando... claro que no lo sabían, como van a saberlo si fue el crimen perfecto. Un momento, si no fue un crimen, solo tomaste algo prestado.

-Es verdad no fue un crimen.

-¿Que dices?

-No nada, solo estaba pensando.

-Bueno nos vemos después, tengo que ir a ver cómo están... los chicos y yo planean animarlos un poco, ya sabes... no les gusta verlos así.

Harry comenzó a caminar hacia nuestra sala común, ellos si me habían visto... pero yo me ocupe de borrarlo de sus mentes... aunque aún estaba el hecho de que Ronald y la amiga de Harry sabía que yo los estaba buscando talvez solo debería... fingir que a mí también me atacaron, pero que se supone he de perder... ¿el ánimo? Pero se supone que no debía de llama la atención. Pero si no obtenía una nueva víctima ellos creerían que, a esto se estaba complicando tal vez Azul me podría ayudar, primero y fingiría ser atacada por eso desconocido y luego Azul seria la nueva víctima... puede ser ha rayos en que me estaba metiendo, necesitaba refuerzos rápido.

No, no debía de cometer más errores, fui directo al baño de niñas... aquel que estaba abandonado.

-Myrtle, Hey ¿Myrtle estas allí?

-¡Buuuu!

-Ya te dije que no me da miedo...

-Pero...perooo

-Está bien voy a gritar, prefieres una cara aterradora o una de miedo pero sin habla.-Pregunto en tono divertido.

-Está bien, no te burles de mi... sé que no doy miedo.

-No darás miedo, pero eres lo más cercano a una amiga que tengo en este colegio.

-No te entiendo si tú eres como ellos, como el.-Tembló ante la mención.- ¿Porque eres buena conmigo?

-Porque estoy en desacuerdo, pero eso es un secreto entre tú y yo... Ya te explique que para los sangre pura, las apariencias son los más importante.

-Sí, lo se... lo sé.

-Myrtle.

-Mmm.

-Pevees te ha vuelto a molestar.

Vi como sus ojos de fantasma se humedecieron de nuevo.

-¿Que te hiso esta ves?

-Lo de siempre.

Escuchamos pasos...

-Myrtle me tengo que ir.

-Si adelante, yo vigilo.

-Gracias.

Me dirigí a la entrada de la cámara, la abrí como me había explicado Salazar que lo hiciera, recorrí el camino ahora limpio. La primera vez que vine mi antepasado gemía de dolor ante la muerte de su bebe... así es como llamaba al basilisco.

Me acerque al cuadro de mi antepasado.

-Creo que metí la pata.

-¡Y ahora qué hiciste insolente!

-Cállate G, no tengo tiempo para tus parloteos.

La estatua comenzó a avanzar...

-¡G! La niña tiene razón no seas tan impertinente.

Salazar Slytherin ya no era más un cuadro, no había sido necesario armar algún acto oscuro o algo parecido, ya que algo no tan oscuro se encontraba oculto entre estas paredes y eso no era necesariamente un basilisco; sino el cuerpo de un gran mago.

Él me había explicado que su alma estaba reposando en aquel cuadro, que su cuerpo nunca había sido sepultado, cuando él era joven desapareció por estar en desacuerdo con Godric Gryffindor ya que creía en la pureza de sangre y en otros aspectos, el dejo al basilisco en los subsuelos de Hogwarts, es verdad el cumpliría con un objetivo... pero mientras tanto era el dragón de un objeto más importante, su propio cuerpo... sepultado entre las alcantarillas de Hogwarts, el que alguna vez había sido su hogar.

Desde ya hace algún tiempo lo visitaba aquí, tenía a los elfos a su disposición, conocía pasadizos que aun todos desconocía, ni siquiera el mismo director de Hogwarts tenía conocimiento de su presencia en el castillo.

-Lo siento mi señor...

Aun no le agradaba a la estatua, pero que podía hacer... parece que el aun no caía ante mis encantos.

-Para que has visto pequeña.

-Pues vera...

[...]


Le termine contando todo, primero me reprendió por ello porque bueno... me había pasado un poco. Pero me sugirió que me divirtiera un poco con el don de aquellas replicas; ya que yo les arrebate su don por un objetivo, y tenía que cumplirlo.

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***Lo sé, me pase...

Reviví a Salazar, pero él no es malo... al menos no tanto como el señor oscuro. El solo quiere que su casa regrese a la cumbre y que su apellido vuelva a ser reconocido. Además aborrece al señor oscuro, porque este mancho su descendencia y está en su contra, por el mal camino que llevo a los suyos. ***

-Os dejo una imagen en MULTIMEDIA, así es como se ve Salazar en la actualidad-

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SALUDOS ESTRLLADOS

Kendra... Y el Torneo de los Tres MagosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora