Vicky no esperó más. Bajó con lentitud, dejando un camino de besos entre los muslos de Maddy. Cada caricia, cada roce, encendía más su piel. El calor en la habitación no se comparaba con lo que ambas sentían. Maddy ya no podía contenerlo. La deseaba. De tantas maneras que era imposible contarlas.
De pronto, con un impulso cargado de necesidad, Maddy llevó su mano a la nuca de Vicky, guiándola hacia su rostro. Sus labios se encontraron con urgencia, un beso profundo que desbordaba deseo y entrega. Vicky deslizó su lengua entre los labios de Maddy, iniciando un juego íntimo y profundo donde ambas buscaban el control, perdiéndose en la intensidad.
Pero los labios de Vicky pronto abandonaron los de Maddy, regresando a su descenso con una mirada tan decidida que le robó el aliento. Su boca regresó a los muslos de Maddy, y la pelirroja sin aguantarse más la sostuvo con fuerza, guiándola hacia donde su cuerpo la necesitaba.
El primer contacto fue como una descarga eléctrica. Maddy cerró los ojos, un gemido salió de sus labios cuando sintió la lengua de Vicky deslizarse por el lugar exacto, con una firmeza deliciosa, como si supiera exactamente cómo tocarla y cómo llevarla al borde
-Mi-mierda... -gimió Maddy, con la voz entrecortada.
Cada sonido que escapaba de su boca se convertía en combustible para Vicky. Su lengua se movía con ritmo, con hambre, buscando arrancarle cada jadeo, cada súplica. Y cuando escuchó su nombre entre los labios entreabiertos de Maddy, supo que no pararía hasta verla perderse por completo.
-Vi-Vicky... mhm... n-no pares -rogó Maddy, aferrándose a su cabello con desesperación, temblando bajo sus labios
Subió lentamente por su cuerpo, dejando un rastro de besos húmedos, de pequeñas marcas que ardían con cada roce. Sellos invisibles que decían: "es mía." Necesitaba que todos supieran a quién pertenecía esa piel.
Sus dedos comenzaron a explorarla lentamente, con precisión, hasta rozar justo donde Maddy más la necesitaba. Todo en ella temblaba con cada movimiento de Vicky.
Sus miradas se encontraron. Vicky, con la respiración agitada, los ojos oscuros por el deseo, le susurró al oído con una voz baja y ronca:
- Dime cuánto lo quieres mami
-Mucho...te ne-necesito amor -respondió Maddy con un hilo de voz, temblando por el deseo
Sin más, Vicky deslizó dos dedos dentro de ella, llenando el espacio con una dulzura cargada de urgencia, provocando una oleada de placer tan intensa que Maddy apretó los ojos, y su espalda se arqueó hacia ella, mientras que sus gemidos se intensificaron, envolviendo la habitación con su sonido, sintiéndose completamente vulnerable... y completamente segura
Vicky la miró con una sonrisa de complicidad y deseo, sabiendo exactamente el poder que tenía sobre ella.
Maddy estaba temblando, atrapada en un torbellino de placer, aferrándose a las sábanas, dejando que el ritmo la envolviera.
Vicky sin detener el ritmo de sus dedos, subió lentamente, dejando besos suaves por su piel: piernas, vientre, pecho, cuello... hasta volver a su boca, donde la besó como si el mundo se desvaneciera a su alrededor.
Sabía que Maddy estaba cerca, que el clímax la envolvía. Pero ella quería más. Quería prolongar ese instante, saborear cada segundo.
Se apartó un poco, con los labios aún húmedos, y tomó la barbilla de Maddy con suavidad, obligándola a que los ojos azul/verde de Maddy se encontraran con sus intensos ojos azules casi negros
- mírame, mami -susurró Vicky con una voz baja y cargada de deseo
-¿Po-por qué paraste...? -preguntó Maddy, frustrada, con el ceño fruncido y los labios hinchados
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INTERLINKED ✉︎ Young Miko
ФанфикшнMadeline es silencio, inseguridad y sueños escondidos en una libreta. Victoria es luz, fama, y aunque todos la ven... muy pocos realmente la conocen. Ambas buscan algo que se sienta real. Un choque. Una mirada. Una conexión inevitable. No fue casua...
