Habían sido días intensos, llenos de risas, momentos robados, y silencios que hablaban más que las palabras. Pero ese día... tenía otro sabor.
Era el último que Maddy y Vicky pasarían juntas antes de que Vicky tuviera que regresar a su gira. Maddy trataba de no pensarlo demasiado, pero cada vez que Vicky la miraba, como si quisiera memorizar cada parte de su rostro, se le hacía un nudo en el pecho.
Era un adiós temporal, lo sabían, pero aún así dolía un poquito.
En la cama, entre sábanas desordenadas y almohadas tiradas, Maddy abría los ojos poco a poco, aún sintiendo la calidez del cuerpo de Vicky pegado al suyo.
Vicky seguía dormida, abrazada a ella con un brazo alrededor de su cintura, el rostro enterrado en su cuello y una pierna cruzada perezosamente sobre las de ella. Respiraba tranquila, su rostro relajado, con la boca entreabierta, completamente rendida al sueño. Maddy sonrió al verla, y deslizó lentamente sus dedos por su espalda, acariciándola con ternura.
—Ey amor —susurró— Ya es hora
Vicky hizo una mueca, frunció el ceño y sin abrir los ojos se acurrucó más.
—Cinco minutos ma'...
— Ándale amor, hoy es un día ocupado —insistió Maddy, sonriendo, mientras la abrazaba más fuerte.
Vicky abrió los ojos lentamente, y al ver a Maddy tan cerca, tan suave, tan suya... sonrió.
—¿Qué hora es? —preguntó con una sonrisa torpe, aún medio dormida
—Es temprano, como las diez — dijo Maddy, dándole un beso en la frente
Vicky soltó un pequeño quejido mientras se estiraba, y en el movimiento terminó acurrucándose más contra Maddy, apoyando la cabeza en su pecho.
—Diablo... qué nervios —murmuró, dejando escapar el aire en un suspiro.
Maddy, sonriendo con ternura, deslizó sus dedos por el cabello de Vicky, calmándola con cada caricia suave.
—Baby, te va a ir súper bien, ya lo sabes
Vicky cerró los ojos por un momento, sintiendo el latido de Maddy contra su oído, un ritmo constante y tranquilo que la hacía sonreír, disfrutando de ese pequeño refugio de calma antes de que el torbellino de la noche la envolviera.
Porque esa noche era espacial, Vicky subiría al escenario con Karol G para cantar por primera vez en vivo su canción juntas. Era un paso grande. Importante. El público. Las luces. Las cámaras. Y Maddy... estaría ahí con ella.
Vicky se incorporó un poco, apoyando el codo en la cama para poder ver mejor a Maddy. Sonrió con suavidad, pasando la yema de sus dedos por la cintura de Maddy, haciendo que un escalofrío recorriese su piel.
—¿Sabes qué me da ma' nervios que eso?
—¿Qué?
Vicky hizo una pequeña pausa, bajando la mirada hacia sus labios antes de volver a subir a sus ojos.
—Despertar sin ti los siguientes dias.
Maddy sintió un nudo en la garganta, uno que no venía de la tristeza, sino de todo lo que esa frase le hacía sentir. Se mordió el interior de la mejilla para no quebrarse.
—No me hagas llorar desde las diez de la mañana, por favor —susurró, acariciándole la mejilla con la punta de los dedos.
Vicky soltó una risa bajita, se inclinó y la besó despacio, sin prisa, como si pudiera parar el tiempo solo un rato más. Como si la estuviera memorizando.
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INTERLINKED ✉︎ Young Miko
FanfictionMadeline es silencio, inseguridad y sueños escondidos en una libreta. Victoria es luz, fama, y aunque todos la ven... muy pocos realmente la conocen. Ambas buscan algo que se sienta real. Un choque. Una mirada. Una conexión inevitable. No fue casua...
