Scene thirty one.

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Lies.

Su semblante que irradiaba preocupación, cambió a uno lleno de felicidad tras decirle que su chico estaba "bien" aunque estaba consciente que era lo contrario. No podía hacerle saber cómo estaba realmente, además de que yayo me dijo que no le comentase nada al respecto hasta que ésta estuviese bien.

-Y... am...- jugueteé con mis dedos nerviosa- los darán de alta en una semana y, a lo que escuché, creo que José irá a San Luis Potosí con su banda, claro, ya que esté en mejores condiciones- ¿cuándo es que empecé a ser una mentirosa? Me decepciono. Duele hacerlo pero como lo dije anteriormente, es por su bien.

-Es joda ¿cierto?- me mira atónita.

-N-No, no lo es- muerdo mi labio inferior- hace un rato vino su mamá y sus hermanos... escuché cuando se lo estaban diciendo y él dijo que no había problema.- basta, debo dejar de mentir.

« ¿Dejar de hacerlo? ¿Por qué? ¿Quieres decirle ya todo de una vez y le dé un paro o qué chingados? »

Punto a su favor.

-¿Y qué dijo de mí? ¿Te preguntó algo?

-Am, sí, sí preguntó por ti que cómo estabas y le dije que bien, sí, eso.- rasqué mi cabeza.

-Tan lindo él- sonrió- quiero verlo y abrazarlo mucho ¿sabes?- voltea a verme, su mirada brillaba, seguro e internamente sentía tanta felicidad pero cuando supiese la verdad, todo se desmoronaría y se pondría depresiva- y besarlo, verlo a los ojos, todas esas cositas.

-Lo harás amiga.

« ... dentro de unos meses... »

-Hola pequeña saltamontes- la voz de yayo entrando a la habitación me sacó un susto.

-¡Yayo!- exclama con emoción mi amiga.

-¿Cómo estás?- besa su mejilla- quiero creer que bien, digo, de sólo verme estás emocionada.

-Sí, estoy feliz- sonríe.

-Seguro Fabiola te dijo que el gigantón de tu novio preguntó por ti para saber si estabas bien, es lo que quiero creer- me mira y guiña el ojo. Este hombre me va a matar

-Eh... sí, le dije- asentí varias veces con la cabeza.

-Y le estaba comentando que ya quería abrazarlo y besarlo.- le dice.

-Lo harás pequeña- desordena su cabello- pero no ahora, hasta dentro de unos meses...- murmura.

-¿Huh?- le mira desconcertada.

-Este... que debemos irnos, sé que no es mucho lo que vine a verte o Fabiola igual, pero, um... juxi y laura quieren saludarla y, este, eso, quieren verla- y yo que pensaba que era la que se sentía tan nerviosa e incómoda con esto de mentirle, pero ya veo que no.

-Oh, ¿ellos están bien?

-Sí, tienen unas cuantas heridas y eso, pero nada grave, todo bien pequeña- sonríe.

-Me alegra, me los saludan por favor.

-Ajá sí, bueno nos vemos luego ale- besa su mejilla- vamos fabi, juxi y laura quieren saludarte- masculla.

-Adiós amiga.- me despido a duras penas ya que yayo me estaba sacando a jalones de la habitación.

-No le dijiste nada ¿cierto?- pregunta serio.

-No, no le dije nada.- respondo sincera.

-Bien. La mamá de pepe y sus hermanos vendrán en unos diez minutos a más tardar, quieren que les expliquemos la situación.

-¿Juxi y Laura lo saben?

-Sí, ellos ya lo saben y les pedí que si ale les preguntaba algo respecto al gigantón, trataran de no decirle nada sobre cómo realmente está.

-Claro, diciendo que tuvo que marcharse antes para poder irse a San Luis Potosí con su banda pues tenían que presentarse- me apresuro a decir.

-¡¿Qué?!- exclama.

-Le dije eso, fue lo primero que me cruzó por la mente, yayo.

-No pensé que le dirías eso.

-Era eso o decirle todo.

-Hiciste bien, pero el pedo no es ese, si no que, ella va a estarle enviando mensajes y llamándole ¿cómo vamos a lidiar con eso?- frunce el ceño.

-Puta madre eso no lo había pensado- golpeé mi frente con la mano y dolió- ¡auch!- me quejé.

-Já- se burló él.

-No es gracioso- gruño- pero ese no es el punto, am... ¿crees que el doctor nos ceda el celular de pepe y así poder responderle como si fuésemos él?- cuestiono curiosa.

-Puede ser, hay que intentarlo ¿no?

*-*-*-*-*-*-*-*

-... y bueno, lo estarán revisando cada dos horas. Los demás serán dados de alta a más tardar en dos semanas.- finalizó yayo de explicar a la familia de José y al resto de sus amigos.

-Estoy sin palabras- musita Ximena, madre de José, con voz débil.

-¿Y es posible su despertar?- cuestionan Rodrigo y la tía Mary.

-No está definido aún- responde Fabiola.

-¿Por qué sucedió esto?- ahora era Angie quien preguntaba con lágrimas brotando de sus ojos sin cesar.

-Cuando el alcohol reina en ti, quieres comerte al mundo en ese momento.- le responde él.

-Mi hijo, Mary... mi hijo en coma.- solloza abrazándola.

-Sí su madre está así... imagínate a alejandra que es su novia- le susurra al oído Fabiola a yayo.

-Mientras no se salga de nuestras manos esto, ella estará bien- masculla.

-¿A qué se refieren?- enarca una ceja Alejandro quien logró escuchar en parte lo que éstos se decían.

-Algo traman- aseguran ryan y luis.

-Es una falta de respeto secretearse frente a los demás ¿sabían eso?- espeta la tía Mary luego de dejar de abrazar a la madre de José.

-Lo sentimos.- se disculpan ambos.

-Alejandra, la novia de pepe no sabe que él está en coma.- escupe yayo directamente.

-¿Entonces qué le han hecho saber?- frunce el ceño la tía de José.

-Mentiras.- responden ambos.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Maratón 1/3.

¡WOOOOUH!

-JDTrouble.

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