DISCLAIMER: Ninguno de los personajes, salvo el personaje de Gaby, que aparecen en este fic me pertenecen, son propiedad d S. Meyer, pero la historia me pertenece por completo, es totalmente de mi propiedad.
Capitulo 1: Accidente, noticias y reencuentro
Pov Bella
— Tú, ¿Le has hablado de mí? — pregunté asombrado.
— Tenía derecho a saber — contestó mirando con tristeza a mi hija.
—Pues no sé si serás consciente de ello o no, pero me acabas de hacer el hombre más feliz del mundo —. Las palabras salieron de mi boca espontáneamente, sin que yo me hubiera propuesto decirlas.
— No me digas —dijo alzando la barbilla, pero pude notar un deje de tristeza en su voz — pues no es eso lo que opinabas la última vez que hablaste conmigo —. Me reprochó dolida. En ese momento volví a sentirme el ser más miserable de la tierra, si al menos ella supiera...
— Bella... — intenté decirle con mi hija aún en brazos pero ella me interrumpió.
— Es igual Edward, no te excuses, sólo espero que mientras estés aquí, sepas comportarte, solamente es una niña.
— Por supuesto am... Bella, no tienes ni que pedírmelo —. Terminé diciéndole, sintiendo como mi corazón se contraía dolorosamente al sentir su desconfianza...
—Bella ¿La lesión es muy grave? —, Preguntó Emmett muy oportuno, rompiendo la tensión del momento —. ¿Qué pasó exactamente?
— Se ha roto el fémur, Emmett, ha sido grave, pero ya está bien, aunque la recuperación va a ser dura. Y bueno yo no estaba presente cuando sucedió pero Rose y Alice dicen que una bicicleta que no circulaba por el carril que debía la atropelló tirándola al suelo.
— ¿Se ha hecho mucha pupa la abu?—, preguntó Peter mirando con aprensión a su tía.
—Bueno bastante, pero ya está bien, ya os digo que cuando la pasen a una habitación iréis a verla. Pero la próxima vez que vengáis con Emily al hospital...
— Sí, sí ya lo sabemos, — la cortó mi hija rodando los ojos — no nos podemos separar de Emily sin decirle donde estamos, no tenemos que correr por el hospital —, seguía enumerando mi niña aún en mis brazos, mientras yo me esforzaba por no dejar escapar la sonrisa que me provocaba verle replicar a su madre... Pero era incapaz de dejar de mirarla, ¡qué niña más preciosa!, en verdad era un calco exacto de mí con su pelo del mismo color y la misma forma de la cara, tal y como Rose me había dicho, excepto los ojos, esos ojos chocolate que tanto adoraba. Además parecía lista y, si no estaba entendiendo mal, capaz de traer por la calle de la amargura a un regimiento entero.
— Pero mamá —, siguió diciendo mi niña con ojos de corderito—, no hemos venido corriendo, hemos venido despacito, tranquilitos y sin chillar.
— Tomaré eso como bueno, anda vamos a la cafetería mientras hacemos tiempo para ir a ver a la abuela. Pero ya sabéis, está malita, así que vamos a jugar a...
— Sí, sí a ver quién aguanta más tiempo quieto y callado. El que gane se podrá comer un helado o una galleta de chocolate o lo que se te ocurra en ese momento. ¡Qué manía tenéis las tías, los abuelos y tú de jugar a este juego! si siempre salimos ganando nosotros. Y vosotros siempre nos acabáis teniendo que comprar lo que nos prometéis—. Dijo de nuevo mi niña con una seriedad que me hacía reír.
— Bufff —, bufó mi Bella rodando los ojos como antes lo había hecho mi hija... Debo reconocer que a estas alturas yo me estaba aguantando la risa escondido detrás del hermosísimo pelo cobrizo de mi preciosa niña. ¡Menuda era la criatura! ¿A quién habría salido? De repente el busca de Bella sonó.
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RECUPERANDO TU AMOR
Hayran KurguEdward Masen no tuvo más remedio que separarse de su esposa Isabella Swan, obligado por las circunstancias. Cinco años después un accidente los vuelve a reunir... ¿Podrá Edward recuperar su amor? DISCLAIMER: Ninguno de los personajes que aparecen en...