Las apariencias engañan | L.H (Completa) #Wattys2018

Capítulo 38.

Narra Patricia:

-¡Sabía que lo arreglaríais! -seguía sonriendo. Este chico sonríe más aun que Luke.

-Hola a ti también. -me reí incómoda. Finalmente me abroché el puto cierre.

-Oh... Lo siento por interrumpir. -Luke se puso de pie -¿Qué tienes ahí? -Mike señaló los restos de helado esparcidos por su abdomen.

-Ah... -lo miró -Es que a Patricia le pone el helado. -dijo con desdén. "¡Pero bueno!" Mike me miró riéndose a carcajadas.

-¿Qué? ¡No! -abrí los ojos -Es mentira... ¡Él quería! -le incriminé.

-Eras tú la que estaba teniendo orgasmos con el helado y no conmigo. -Mike levantó un brazo.

-No quiero escuchar eso. -cerró los ojos y suspiró. Luke se rió y vocalizó con los labios, sin emitir sonido "Te pone cachonda y lo sabes" le di una negación y Mike continuó.

-Tenía que preguntaros algo... -ambos le miramos -Quería pediros que fuerais los testigos en mi boda. -me quedé de piedra. Para los que no lo sepan, los testigos son dos personas que, resumiendo, firman en un papel dando a entender que has estado presente en esa boda, que se ha celebrado.

-¡¿Qué!? -grité. Mike se empezó a poner más rojo que su pelo -¡No me lo puedo creer! -empecé a sonreír y a dar saltitos, me abalancé sobre él y le abracé muy fuerte. Escuché a Luke toser detrás de mí. Me aparté y Luke me pasó el brazo por la cintura, marcando territorio.

-No toques mis pertenencias Mike. -ambos rieron. Aparté su brazo.

-No soy 'tu pertenencia'. -rodé los ojos -No soy un objeto. -Luke me miró sorprendido y se cruzó de brazos -¿Al final se lo has pedido? -me mordí el labio sonriendo.

-Ella quería tener a nuestro hijo dentro del matrimonio. -sonrió -Así que... Un día me desperté a su lado y supe que quería pasar el resto de mi vida con ella. -me mordí más el labio "Ojalá alguien me quiera tanto algún día como para casarse conmigo"
-Entonces que, ¿os apuntáis? -miré a Luke y éste, se encogió de hombros.

-Claro. -sonreí de nuevo y volví a darle un gran abrazo. Notaba a Luke revolverse detrás nuestra y le oía quejarse -Felicidades. -tenía unas ganas terribles de hablar con mi amiga Irene.

Mike, después de entablar unas últimas palabras conmigo, se fue.
Luke seguía enfurruñado y cruzado de brazos. Estaba sin camiseta y con helado por encima todavía.
Me acerqué y descrucé sus brazos, tirando de ellos suavemente. Él no me miraba, su mirada se mantenía fija en el techo.

-Venga no te enfades... -me reí -Siempre estás celoso. -acaricié su torso desnudo y relajó el rostro, pero aun sin fijar sus ojos en los míos.

-No estoy celoso. -se mantuvo firme, sin moverse ni mirarme. Sonreí.

-Mírame. -parecía no escucharme -Pues no me mires. -Luke permanecía serio y mirando detrás de mí, evitando mi mirada -Quizá... -bajé las manos hasta la hebilla de su cinturón -Si yo... -fui tirando del cinturón hasta que se lo quité por completo
-A lo mejor... Te relajas. -le bajé los pantalones e introduje una mano dentro de sus bóxers. Gimió y finalmente me miró. Tenía los labios separados y respiraba con dificultad. No pude evitar sonreír al verle en ese aprieto. Moví mi mano acariciando su polla -¿Sigues enfadado? -dije a centímetros de su cara. Asintió mientras suspiraba y se mordía el labio -¿Seguro? -asintió mirando mi boca. Sabía que quería besarme, me gustaba hacerle sufrir. Seguí moviéndola lentamente de un lado a otro, envolví mi mano alrededor de su gran pene y él cerró los ojos por un segundo respirando profundamente. Me lamí los labios y empecé a mover la mano de arriba a abajo
-¿Quieres besarme? -asintió. Le estaba torturando moviendo la mano tan despacio
-¿Te acuerdas de la cantidad de chupetones que me has hecho...? -su respiración iba al compás de los movimientos de mi mano -Me tengo que vengar de alguna manera, ¿lo sabes verdad? -volvió a morderse el labio inferior -Dime cuanto te gusta... -frunció el ceño.