—Pensé que habías muerto— murmuré cuando abrió los ojos, hizo una pequeña mueca de dolor e intentó levantarse.—No todos somos inmunes al dolor— se excusó y rodé los ojos.
Nos adentramos en el bosque y a los pocos minutos un nuevo helicóptero de S.H.I.E.L.D se desplegó.
—Ya es el tercer en cinco minutos— murmuré tratando de ver el cielo a través de los árboles que se alzaban a nuestro alrededor.
Ambos empezamos a acelerar el paso, alzaba la vista de vez en cuando para asegurarme que no nos vieran.
—Hay uno sobre nosotros— dijo y alcé la vista.
Se podía ver el helicóptero con la puerta abierta, un hombre armado estaba sentado en el borde fijando su vista en los árboles, justo sobre nuestras cabezas. Volví la mirada al frente para evitar caer, pero fue demasiado tarde.
—Diablos— murmuré luego de observar la suela de mi zapato. Había pisado un espino, uno muy grande. Luke me sacó el zapato y mi pie se encontraba hinchado, brotaba mucha sangre de diferentes puntos, era un poco escalofriante no sentir ni siquiera cosquillas. Se escuchó un disparo cerca de nosotros y me alarmé. Luke pasó mi brazo por sus hombros e intentó levantarme—. No ¿Qué haces? Yo puedo caminar.
—Si empiezas a caminar la piel se te desgarrará, entonces será peor— dijo y terminó de levantarme.
Otro disparo se escuchó, pero esta vez más cerca, Luke empezó a correr mientras yo me aferraba a su cuello para no caer. Las balas cada vez eran más frecuentes, aun podía sentir mi pie sangrando y era una sensación bastante incómoda.
—¿Cómo lograremos salir del bosque sin que nos vean?— pregunté con preocupación, él sólo sonrió y fruncí el ceño.
—Tengo refuerzos y una sorpresa— respondió y fruncí el ceño aun más.
—¿Cómo conseguiste refuerzos desde adentro? ¿En qué momento...?
—No te preocupes linda, saldremos de esta— susurró y besó mi frente.
Sentí un roce en mi brazo y pasé mi mano por la zona, seguramente había sido una rama.
—¿Cuánto falta para llegar?— pregunté tratando de mirar en mi brazo.
Una bala había acariciado mi la zona, limpié la sangre en mis dedos de mi camisa y traté de ocultar la herida.
—¿Ves esa camioneta negra?— preguntó señalando un punto frente a nosotros, ladeé la cabeza y asentí.
—Ahí está tu sorpresa— dijo con una sonrisa, la ventana del copiloto bajó dejando ver a una rubia, fruncí el ceño unos segundos y luego mi rostro se iluminó.
—¡Emily!— grité con emoción, se bajó del auto y lo rodeó con rapidez.
Luke me dejó en el suelo y segundos después me vi en los brazos de mi mejor amiga.
—¡Brooke, preciosa! Ha pasado mucho— exclamó separándose y reímos, aquellas palabras sonaron extrañas saliendo de ella, pero no le di mucha importancia.
—Después se ponen al día, ahora tenemos que irnos— interviene Luke y rodamos los ojos, él me cargó al puesto del copiloto y Emily se sentó atrás con la excusa que dormiría durante el camino.
Luke y yo no conversamos en el camino, estaba tan concentrada en las heridas de mi pie y brazo que olvidé todo a mi alrededor. Ambas habían dejado de sangrar de forma abrupta, la del pie se podía ver que empezaba a cicatrizar y la de mi brazo era casi inexistente.
—Aquí es— anunció Luke y casi, instantáneamente, Emily despertó.
Todos se bajaron y por órdenes de Luke tuve que esperarlo para que no caminara y él me cargara hasta el departamento donde nos quedaríamos, entramos por la parte trasera y subimos por el ascensor. En el camino me explicaron que, lo que Phil me había dicho, era mentira. Una parte de mi estaba confundida, se supone que S.H.I.E.L.D eran los buenos. Cuando algo o alguien amenazaba a la Tierra llamaban a Los Vengadores, Black Widow, Hawkeye, El Capitán América y Hulk. Thor sólo aparecía en caso de que ya estuviera en la Tierra o la amenaza se extendiera hasta Asgard, quien sabe.
—Solo tengo dos habitaciones, en la mía podemos dormir Brooke y yo, la otra quedaría para Luke— explicó Emily mientras nos mostraba las habitaciones.
—No te preocupes... Luke y yo... Podemos dormir en la más pequeña, para que no... Compartas tu cama— intervine casi de forma automática e inconsciente, sobretodo inconsciente.
Luego de que analicé cada una de mis palabras no me sentí tan incómoda, según lo que me dijo el castaño estábamos saliendo ¿no?
—Por mi suena perfecto— dijo Luke y mis mejillas se sonrojaron, miré a Emily y un rastro de celos e ira se paseó por sus ojos.
—Si, suena bien— forzó sonrió y me pasó por al lado, miré a Luke interrogativa y sólo rió.
Entramos en la habitación que compartiríamos de ahora en adelante, la cama era bastante grande como para dormir dos personas sin siquiera rozarse. Había un televisor de pantalla plana, de 42 pulgadas, un escritorio sin nada relevante encima y una ventana frente a la cama.
—¿Qué lado de la cama quieres?— pregunta leyendo algo sobre el escritorio.
Podía escoger el lado derecho, pegado a la pared o el izquierdo en el borde.
—En la pared— respondí con una pequeña sonrisa y me apresuré en acostarme, tomé una de las sábanas y me cubrí hasta el cuello.
Escuché su risa ronca, luego sentí la cama hundirse a mis espaldas. Eran alrededor de las 13:04, pero me sentía cansada y supongo que Luke aun más ya que ha cargado conmigo la mayor parte del día—. ¿Por qué S.H.I.E.L.D querría experimentar con nosotros?
—No lo sé, tal vez quieren crear una nueva arma biológica o un nuevo vengador— respondió después de un rato. Me estremecí al sentir un aire frío recorrer mi espalda—. ¿Quieres más sábanas? Puedo darte la mía.
—No, estoy bien— mentí y no insistió más, cerré los ojos y me desvanecí con un solo pensamiento en la mente.
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They're Gonna Need More Than a 2nd Chance (ECAYT#2) ©
Fanfic¿Existe tanta maldad en un ser para ser capaz de jugar con la mente de otra persona? En las renovadas instalaciones de S.H.I.E.L.D, el súper soldado Steve Rogers, se ve arrastrado en una tortuosa situación gracias a la inconsciencia de Brooke. Las...