LA BODA

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ALMA
Tenia unas enormes ojeras, la noche anterior no había dormido nada, ¿como se supone que iba a dormir si me casare?, los nervios me mataban. Desde muy temprano hay mucho movimiento en mi casa, solamente escucho que entran y salen personas, mi madre no me deja ni salir de la habitación, ya que la mamá de Alan quería que todo fuera una sorpresa.

Mis hermanas y Karen estaban a cargo de peinarme y maquillarme, mientras que Carlo y se encarga de la Comida, mientras que los demás ayudan en lo necesario, todos en verdad están muy ocupados el día de hoy, mi madre y la mamá de Alan prepararon todo muy rápido, según Karen todo será muy sencillo, en verdad no creo nada de eso, ya que la madre de Alan tiende a ser muy extravagante.

-Es hora del vestido-dice Karen

Suspiro. Miro el vestido blanco, tiene encaje en la espalda, en verdad es hermoso.

Karen me mira y sonríe.

-Te ves hermosa Alma-dice ella

Me miro en el espejo, quedo completamente en shock al verme al espejo, Karen me hizo un peinado con unas hermosas trenzas y un chongo, mi hermana me había maquillado, y el vestido, era hermoso, al ver,e en ele espejo tuve muchos sentimientos encontrados, dolor, felicidad, emoción, miedo... Mi vida esta apunto de dar un giro de 180 grados, hace una semana estaba acostada en mi cama revisando algunos documentos del trabajo, y ahora, estoy embarazada y apunto de casarme de mi jefe, es increíble como cambian las cosas de un momento a otro.

-Gracias-digo aun atonita

-Estoy tan feliz por ti hermana-dice Elizabeth frotando su panza

Le sonrió tiernamente, mi hermana se miraba realmente hermosa al frotar su enorme barriga... A su bebé, en unos meses también tendré a mi bebé, un hijo... De Alan...

Inconscientemente pongo ambas manos sobre mi estomago, unos meses mas...

Mi madre entra ala habitación y me mira con lagrimas en los ojos, me abraza muy fuerte y me sonríe con una lagrima recorriendo por sus mejillas.

-Estas hermosa hija-dice

-Gracias -digo

-Será mejor que las dejemos a solas unos minutos-dice mi hermana Victoria

Elizabeth y Karen asienten y salen de la habitación, so,o quedamos mi madre y yo, miro a mi madre aun con lagrimas en los ojos. Ella se sienta en mi cama y yo la sigo, me sonríe y me toma de la mano.

-Esto es tuyo -dice llorando

Miro mi mano, esta una pequeña cadena con un dije de un corazón, este se abría, pero no hay foto.

-Tienes que poner la foto de tu bebe ahí-dice mi madre

Asiento y la abrazo.

-Muchas gracias mamá-digo

-Alma, se que no soy la madre numero uno, siempre peleábamos, estoy consiente que mas de una vez llorabas por culpa mía y de tu padre, pero quiero que sepas que te amamos. Aun recuerdo cuando naciste, en esta misma casa hace años, recuerdo el susto que me diste cuando saliste de mi y no reaccionabas,tu padre te llevo al hospital, en esos momentos pense lo peor, pero afortunadamente tu padre Volvió después contigo en brazos, estaba tan aliviada que tu hayas llegado a este mundo con mucha salud apesar del susto que nos causaste fuiste muy querida, y quiero que sepas que esto orgullosa de ti-dice

Al escuchar las palabras de mi madre no pude evitar el llorar, esas palabras que mi madre me dijo, en verdad me hace sentir bien, me hace solo pensar en cosas buenas, todos los problemas que algún día pude llegar a tener con ella ya no importaba mas.

Enamorándome de mi jefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora