Capítulo 10

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Despierto repentinamente. Abro los ojos y observe mi habitación, como los rayos de sol se filtran por mi ventana, como se filtran entre las cortinas color blanco. Mi despertar no es como uno cliché de los libros o películas en los cuales los personajes se despiertan por el sonido "ensordecedor" de la alarma o por la luz que se filtra por las ventanas. No, yo me desperté por una fuerte patada en mi espinilla. Me la ha dado Axel. El no se había movido en toda la noche hasta ahora. Creo que ya le está lleagando la resaca. Pobre de él.

Yo nunca he bebido, solo alguna que otra copa de champán en una boda. Nunca he ido a fiestas de jóvenes locos adolescentes. Y a las que voy, mayormente son, fiestas familiares en las cuales no me dejen beber. Tampoco me interesa beber. Si pudiera, bebería muy poco pero bebería.

Recibo otra patada por parte de Axel. Lo pateo devuelta para que se despierte. El se queja pero no se despierta. Le doy otra pero esta vez me ignora. Lo pateo más fuerte que la otra vez causando que él se caiga de la cama. Al instante me arrepiento de haberlo hecho y corro hasta el otro lado de la cama. Le ayudo a incorporarse. El aún está un poco dormido pero se queja por el dolor que le causó mi empujón.

-¿A qué ha venido eso?-Reprocha Axel ya una vez de pie.

-Lo siento, es que no me dejabas dormir con tus ronquidos.-Me defiendo.

-Ya. ¿Sabes? Una simple tocada en mi hombre y un "Axel, no me dejas dormir, ¿podrías intentar no roncar?" hubiera bastado para que yo dejara de roncar. No me tenías que patear.

-Sí claro, como si hubieses escuchado, antes de haberte pateado así de fuerte te di unas patadas ligeras y no dejabas de roncar.

-Pues si no me querías escuchar pues te hubieses ido.

-¿Disculpa? Este es mi cuarto y mi casa no me voy a ir. Ugh! No voy a pelear contigo a plena luz del día, voy al baño.

Giro sobre mis talones para ir en dirección hacia el baño. No pienso pelear con Axel. No ahora, en la mañana, donde me gustaría pasarla tranquila. Abro la puerta del baño, el cual se encuentra dentro de mi cuarto, y la cierro fuertemente. Abro el grifo, cepillo mis dientes, enjuago mi rostro , me seco y abro el grifo de la ducha para asearme.

Ya estoy limpia con ropa fresca y mi cabello recojido en una coleta media despeinada pero de esas que se ven lindas. Salgo del baño e inmtiatamente estoy en mi cuarto, el cual se encuentra vacío. Axel no está. No me parece extraño, lo más probable es que esté en la cocina haciendo café.

Salgo de mi habitación y camino ligeramente por el pasillo, bajo las escaleras y ahí se encuentra Axel. Haciendo café y desde mi punto de vista haciendo un desayuno completo.

-Valla, mira quien decide hacer el desayuno después de su comportamiento y forma de agradecerme por haberle dado hospedaje después de haber llegado ebrio a mi casa.

Axel se gira y se apoya en la isla de la cocina donde se encontraba cortando unos vegetales. Se queda así por unos segundos que parecen der horas. Con la misma expression en su rostro. Está serio y no sé por qué. Me pregunto si es por m comentario pero no fue un comentario ofensivo. Se incorpora y camina hacia mi con la misma expresión. Pero esta vez en sus ojos hay un brillo. Un brillo que parece demostrar deseos, ansias, pero no sé de qué. Se detiene frente a mi. El está demasiado de cerca haciendo que mi respiración se corte. Es como si de momento estubiésemos viviendo en el espacio en una nave, y hubiesen apagado el oxígeno haciendo que nuestros pulpones no se puedan expander. Estaba nerviosa y confundida. Axel etaba serio pero de repente acaricia m rostro con su mano y me atrae hacia él haciendo que nuestros labios se peguen.

Axel me está besando. Es un beso fuerte y él alparecer lo deseaba. Yo lo sigo pero estoy tan confundida que no logro seguir el beso que él quiere. Su mano pasa de mi espalda hata mi trasero y luego mi muslo. Solo eso hace que yo le sgia el beso que él quiere. El beso se intensifica y el hace un gesto para que abra mi boca, la abro y su lengua entra en mí. Coloco mis manos alrededor de su cuello. Mis manos suben hasta su cabello y lo despeino. Axel coloca sus manos en mis muslos y me levanta. Seguimos el beso y Axel me lleva hasta el sofa me acuesta delicadamente y sigue besándome. El besa mi cuello y yo tirro mi cabeza para atrás dándole más espacio para darle más espacio. Baja hasta mi hombre dando pequeños besos hasta que llega al manguillo de mi sostén.

El se detiene dándose cuenta de lo que ha hecho. Axel se queda con la Mirada fija en mi cuello. El me ha dejado un chupetón. Nuestras respiraciones están aceleradas por la falta de aire. Yo me encuentro inmóvil mirando el rostro de Axel, no sé que hacer o como actuar. Estoy paralizada.

-Yo... Este.-Balbucea Axel. Parece estar arrepentido.

Se levanta rápidamente y se queda mirándome.

-Lo siento.-Dice sin quitar la mirada de mi.

Me levanto al instante y lo miro directamente a los ojos.

-¿A qué ha venido eso Axel?-Pregunto en voz baja y mi voz suena más dulce de lo normal.

-Yo... Lo....-Me mira directamente a los ojos.-Yo lo necesitaba.-Axel baja la mirada.

Suspiro y lo miro cariñosamente.

-Entonces no lo sientas.-Coloco mi mano en su rostro provocando que él suba la Mirada y me mire directamente a los ojos. Nuevamente, ahí están sus ojos verdes que tanto me gustan.-Tú me besaste por que yo lo necesitaba y ahora lo necesitabas tú. No me importa la razón.

El sonríe debilmente y vuelve a bajar la mirada.

Tomo sus manos haciendo que la vuelva a subir.

-Dime qué es lo que pasa.-Le miro con preocupación.

Axel suspira.

-Se va a quemar el desayuno.-Se desprende de mis manos y camina hasta la cocina. Por alguna razón el no me quiere decir lo que sucede, y eso me preocupa.

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Holis.

Pues nada, aquí les dejo un cap Nuevo. Me he dado cuenta, después de ver el video de sitiches de Shawn Mendes, que el haría de Axel perfectamente. Obviamente, como es una novela, pues  le cambiaré el color de ojos etc.

Bye

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AlexiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora